Está fuera de toda duda que, tras ocho meses de relación, Íñigo Onieva, el atractivo novio de Tamara Falcó, ya es uno más en la familia de la marquesa de Griñón. Derrochando gestos de complicidad, el ingeniero compartió un familiar domingo en la casa de Isabel Preysler, donde demostró que ha encajado a la perfección con sus ‘cuñados’, Ana Boyer y Fernando Verdasco, y con el primo de su novia, Álvaro Castillejo, y su prometida, Cristina Fernández, que, siempre que las medidas sanitarias lo permitan, se casaran este verano en Sotogrande.
Dos días antes, Íñigo y Tamara habían sido fotografiados disfrutando de una romántica cena para dos en uno de sus restaurantes favoritos de la capital, demostrando que viven un momento sentimental inmejorable, por lo que ya comparten su día a día en el piso que la ganadora de MasterChef Celebrity ha alquilado en el centro de la ciudad.