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El 25 de marzo Ana Rosa Quintana empezaba a presentar telemáticamente el programa que dirige desde hace años en Telecinco. Tanto ella como Joaquin Prat se encuentran en cuarentena después de haber estado en contacto estrecho con un positivo por coronavirus, así que se ha pasado estos días trabajando desde su casa, mientras en el plató estaba Ana Terradillos, la encargada de sustituirla. Este lunes, la periodista ha cambiado de escenario porque, tal y como ha contado, la situación en su hogar se ha complicado y sus hijos están en casa al haber empezado las vacaciones académicas.
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- Ana Rosa Quintana, en cuarentena preventiva, arranca su programa desde casa
"Estoy fenomenal, engordando. Imagínate en Semana Santa y sin poder salir de casa. Ya he probado las torrijas", ha contado Ana Rosa con sentido del humor cuando le han preguntado desde el plató. La presentadora ha dado negativo ya en una ocasión, pero permanece confinada en las vacaciones que ha empezado hoy mismo. "Me vais a permitir que me incorpore el lunes", ha dicho, además, confirmando así que si todo va bien volverá a trabajar de manera presencial la próxima semana, cuando ya haya terminado su cuarentena. Ante la falta de actividad, la comunicadora ha admitido que lo único que le queda es la comida típica de estas fechas: "Me tengo que poner a hacer torrijas", ha bromeado con sentido del humor y dejando con ganas de probar el dulce a todos sus colaboradores.
- Ana Rosa Quintana ya estuvo teletrabajando al principio de la pandemia por una faringitis
Ya el pasado año, en pleno primer confinamiento, prometía a sus compañeros que les llevaría unas torrijas para poder disfrutar en el trabajo. Y a pesar de que llegaban tarde, estos dulces tan típicos de la Semana Santa terminaban alegrando la mañana de los colaboradores de El Programa de Ana Rosa. Lo hizo con un pan especialmente traído desde Valladolid, que se convirtió en el protagonista: "¡Maravilloso el pan, espectacular! El año que viene quiero el mismo pan", decía, mientras algunos de los presentes halagaban el manjar cuya receta más tradicional puedes encontrar aquí. Además, en abril de 2019, la presentadora regaló sus famosos torrijas a la periodista Esther Palomera, que se las llevaba pidiendo durante varios días. "Se me saltan las lágrimas", comentó en tono de broma la colaboradora. "Las hice ayer mientras veía el debate electoral, así que no sé como estarán", le advirtió la comunicadora.
El trabajo desde casa ha dado lugar a más de una ocasión simpática para Ana Rosa, que comenzó haciendo sus conexiones desde el salón y este lunes lo ha hecho desde un estudio en el que se veía una ventana y un cuadro tras ella. Ha ido mejorando su equipo técnico, pero se ha encontrado con diversos baches, como cuando no podía participar en el debate eel pasado día 25 porque no la escuchaban desde el plató, donde la discusión subió de tono rápidamente. "Ana Rosa, te vas tú y eso se desmadra, se me suben todos...", bromeaba Ana Terradillos. Sin embargo, es cuestión de tiempo que la conocida como "reina de las mañanas" vuelva a sentarse en su silla y ponerse al frente de su programa, en el que lleva más de quince años trabajando.
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