Si tras tener a su primera hija, Rocío Carrasco ha asegurado que el comportamiento de Antonio David Flores había mejorado -hasta tal punto que pensaba que sería para siempre- cuando se quedó embarazada de David las cosas cambiaron tanto que decidió separarse. Lo que provocó esta decisión fue una infidelidad, que según ha contado, presenció ella misma una noche en una discoteca de Chipiona. Sin poder contener las lágrimas, la hija de Rocío Jurado relata en el capítulo número dos del documental Rocío, contar la verdad para seguir viva todo lo que ocurrió el día en el que llegó a la conclusión de que su relación había terminado despues de sufrir un ataque de pánico en plena calle.
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Fue en julio de 1998 cuando Rocío comenzó a ver actitudes que no le gustaban de su marido con otras chicas. "
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Tras presenciar esta escena, salió corriendo del local, donde comienza a sufrir fuertes dolores en la tripa: "Yo solo sabía decir: yo me quiero ir vámonos, por favor, y el se viene detrás de mí y me vuelve a decir: 'tú estás loca, tú no estás bien de la cabeza, el embarazo te está afectando a la cabeza' y empiezo a tener un ataque de pánico". "A mí ese ataque de pánico no me entra porque me esté poniendo los cuernos, me entra como madre porque yo estaba embarazada de él", aclara antes de contar que la reacción de su pareja cuando pedía volver a casa fue: "¿Te quieres ir a casa? Yo no te llevo, te vas andando". Fue entonces, tras volver a casa llorando y, posteriormente, darse cuenta de que todo el mundo sabía lo que ocurría cuando decidió separarse.
Han pasado ya 25 años desde que Rocío Carrasco, a sus 18, y Antonio David Flores, con 20, se dieron el ‘sí, quiero’ en 1996 en la ermita de la Santísima Trinidad en la dehesa Yerbabuena, de Castilblanco de los Arroyo (Sevilla), la misma en la que sellaron su amor Rocío Jurado y José Ortega Cano un año antes. Tras darse el 'sí quiero' continuaron con su vida en la localidad barcelonesa de Argentona, donde llegó al mundo su hija Rocío y dos años después David, pero no tardó en fraguarse el final de su matrimonio. Fue entonces, un tiempo después de los acontecimientos que ha relatado, cuando dio comienzo un complicado divorcio que les llevó en diversas ocasiones a enfrentarse en los juzgados. En 2005 comenzaron las denuncias por las distintas declaraciones del ex Guardia Civil en medios de comunicación. Rocío le ha interpuesto una decena de demandas por vulneración de derecho al honor, pero también por desvelar detalles sobre la herencia de Rocío Jurado. La custodia de sus hijos fue una de las cuestiones que más les ha enfrentado judicialmente.
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Además, en marzo de 2017, Rocío Carrasco acudió al Juzgado de Violencia de Género para ratificar ante la juez encargada del caso una querella interpuesta contra Antonio David, en la que se le imputaban los delitos de supuestas “lesiones psicológicas y “quebrantamiento de los derechos de custodia”. Rocío alegó que había sufrido daños psicológicos continuados por parte de su exmarido y aportó como pruebas las declaraciones de Antonio David, desde que se separaron, y una serie de informes médicos para demostrar los hechos que denunciaba. Un año y medio después, el juez de la Audiencia Provincial de Madrid decidió archivar la causa al considerar que el informe forense era “exhaustivo”, pero “incompleto” al haber entrevistado solo a la demandante. Sin embargo, tal y como publicó ¡HOLA!, Rocío decidió no rendirse y agotar todas las vías judiciales en España y, si fuera necesario, acudir al Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo. Desde la separación matrimonial de Rocío Carrasco y David Flores, los dos hijos de la pareja se han visto envueltos, directa o indirectamente, en las batallas judiciales de sus padres. Primero al convertirse en protagonistas del duro proceso judicial por su custodia cuando eran menores -fue compartida durante muchos año - y después al ser testigos de las continuas visitas a los tribunales de sus progenitores. "Quiero a mi padre tanto como a mi madre, a pesar de la distancia. Me encantaría tener una relación buena con ella", aseguraba la nieta de “la más grande” el año pasado durante su participación en Supervivientes.
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