La cuenta atrás ha comenzado para que se emita la primera de las ocho entregas de las que consta Rocío, contar la verdad para seguir viva, una serie documental en la que Rocío Carrasco rompe su silencio para hablar por primera vez de distintos episodios de su vida personal. Uno de los asuntos que más expectación genera es la relación con su hija Rocío Flores, que cambió para siempre en 2012, cuando la joven (entonces menor de edad) se fue a vivir con su padre a Málaga. A lo largo de estos casi nueve años que han pasado desde que ambas dejaran de convivir, ninguna de ellas ha detallado qué fue lo que cambió todo, apostando de esta manera por guardarse para ellas el origen del conflicto. Ese hermetismo, en el caso de Carrasco, ha sido extensible a otros ámbitos, pero su primogénita sí ha hablado sobre su madre en diferentes ocasiones que recordamos a continuación
Para ti que te gusta
Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!
Para disfrutar de 8 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.
Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
Su primera vez en un plató
En verano de 2017 se producía la primera aparición televisiva de Rocío Flores Carrasco. Hasta entonces había apostado por mantenerse en un discreto segundo plano y huir de la popularidad en la que ha crecido, pero hizo una excepción para pisar el plató de Supervivientes y recibir a Gloria Camila a su vuelta de Honduras. Su presencia ante los focos fue breve pero llena de emotividad, demostrando que su tía (ella tampoco tiene relación con Rocío Carrasco) es un pilar fundamental en su vida. Tuvieron que pasar dos años para volver a ver en un plató y escucharla hablar de la batalla judicial de sus padres. "Han sido dos años muy duros, por no decir los más duros que hemos tenido. No es nada fácil, pero gracias a Dios todo ha salido bien.Lo más importante es que toda la familia estamos unidos", decía al comenzar a ejercer como defensora de Antonio David Flores en Gran Hermano VIP.
El hecho de acudir cada fin de semana a plató para hablar del concurso de su padre hizo que pasara de tener una vida anónima a una gran presencia pública que permitió conocer más a Rocío, quien poco a poco fue haciendo algún comentario de su vida privada como por ejemplo que dejaba las puertas abiertas a retomar el contacto con la mujer que le dio la vida. "Confío en el futuro y en los arreglos familiares. Creo que sí. Te estoy siendo sincera. En un futuro, cuando pasen muchas cosas…. Pues claro que sí, no te voy a decir que no ¡Es mi madre!", decía visiblemente emocionada la joven. También comentó que sufre mucho con este distanciamiento, que en alguna ocasión había intentado hablar con ella y que le hubiese gustado que la invitase a su boda con Fidel Albiac, de la que la revista ¡HOLA! mostró todas las imágenes en exclusiva.
El deseo de Rocío en Supervivientes
Tras esta incursión televisiva, en febrero de 2020 iniciaba su propia aventura en Supervivientes. En este concurso, en el que llegó a la final, habló en varias ocasiones con sus compañeros de su situación familiar. Así, reconoció sentirse orgullosa de ser hija de Antonio David y Rocío Carrasco, recordó que fue muy difícil empezar su vida en Málaga y tuvo en cuenta el cumpleaños de su madre, a la que felicitó sin poder contener el llanto y reconoció echarla de menos. Uno de los momentos más destacados de su estancia en Honduras fue cuando se enteró con sus compañeros de la emergencia sanitaria y, muy preocupada y entre lágrimas, pidió saber cómo se encontraba su progenitora. "Que pase esto y no sea capaz de mandarme un mensaje hace que me entren ganas de irme. Con que me diga que está bien, lo demás me sobra", le decía a Lara Álvarez mientras esta intenaba consolarla.
Antes de abandonar los Cayos Cochinos y poner fin a tres meses de aprendizaje, aventura, convivencia y continuos retos, Rocío volvió a referirse uan vez más a su madre. Haciendo balance de todo lo vivido y de las lecciones que se llevaba de la isla explicó que "a partir de ahora quiero que cambien un montón de cosas con respecto a mi familia". Una muestra más de que, tras ocho años sin tener contacto alguno, quiere que se produzca un acercamiento con su madre tal y como comentó tanto directa como indirectamente durante su paso por el reality, en el que coincidió con una persona de la familia: Ana María Aldón, mujer de Ortega Cano, el viudo de su abuela.
En ¡HOLA!, su gran deseo: hablar de nuevo con su madre
Al poco tiempo de volver a la normalidad, Rocío Flores protagonizaba un excepcional posado en la revista ¡HOLA!, donde revelaba los detalles desconocidos de su vida. En su primer reportaje, que se puede ver en nuestras páginas, no solo hacía balance de su paso por Supervivientes, sino que también reconocía que su madre es "una persona fundamental" en su vida, volvía a comentar nuevamente su intención de retomar su relación tanto por ella como por su hermano David y compartía una cuestión que ronda su mente. "He pensado muchas veces en mi abuela; si estuviera aquí, estoy segura de que nada de esto hubiera pasado". Embargada por la emoción, contaba que desde que se instaló en Málaga con su padre ha llamado una seis veces a su progenitora, de las cuales solo una tuvo respuesta "y no fue muy agradable". Además, indicaba que es Rocío Carrasco quien tiene que tomar la decisión de que exista un acercamiento. De momento, la única hija de Rocío Jurado y Pedro Carrasco toma la palabra este domingo por la noche tras años en silencio.
Diversión, risas y espontaneidad en el reportaje de Rocío Flores en ¡HOLA!