Mario Casas, con su Goya ya en la mano, cuenta lo que nunca olvidará de la edición de este año

El pasado seis de marzo los premiados en la última edición de los Goya no pudieron recoger su “cabezón” como todos los años. Las restricciones con las que tuvo que celebrarse la gala debido a la pandemia obligaron a los galardonados a quedarse en casa, aunque también allí lo celebraron por todo lo alto con familiares y amigos. Han pasado ya unos días y la Academia de Cine ha entregado por fin el preciado Goya a actores y cineastas, una ocasión en la que recordaron cómo vivieron esta atípica edición. Entre quienes tiene ya el premio en sus manos está Mario Casas, que se llevó el primer Goya de su carrera como mejor actor por su papel en No matarás. Recordó cómo vivió aquel emocionante momento, en el que todos sus hermanos le abrazaron efusivamente, mientras el pequeño le prestaba una cabeza de juguete de Iron Man en sustitución del busto del pintor.

Mario Casas, un actor de Goya en su faceta de hermano mayor

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“Estaba con mis hermanos, mis padres y fue también la manera más bonita de poder recibir un Goya, es la gente que me lleva apoyando desde que quería ser actor. Al final ellos me han apoyado, han estado ahí y vivir un momento así, desde casa, con los míos, ha sido muy especial" comentó, añadiendo que dejará el premio en la casa familiar. Aunque le habría encantado estar en Málaga con sus compañeros y con Antonio Banderas, gran amigo, recordará siempre este año y el detalle de su hermano pequeño, que tiene seis años y al que adora. “Es de las cosas más bonitas y justo estaba él allí, al final esto va a quedar para mi recuerdo y para el recuerdo de mi familia para siempre” explicó.

© Gtresonline

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Su novia está muy contenta

Mario reconoce que el cariño del público ha sido muy importante desde los inicios de su carrera y que gracias a los fans ha ido creciendo, como ya dijo durante la gala virtual en la que recordó además su película A tres metros sobre el cielo. “Es una película que cambió mi carrera” reconoce. En esta etapa profesional tan dulce cuenta con el cariño de su novia, Deborah François. “Está contenta, como todos” explicó asegurando que por supuesto se lo dedica también a ella. Ha recibido muchas felicitaciones, entre ellas la de su expareja Blanca Suárez, con quien ya en otras ocasiones ha intercambiado halagos. “Tengo compañeros en la profesión maravillosos y al final somos todos amigos y la gente se alegra. De las cosas más bonitas de ganar esto es recibir mensajes de mucha gente a la que se quiere y que al final también te apoyan”.

Todavía no ha podido ver a Antonio Banderas, presentador y director de la gala, con quien ha estado colaborando en un proyecto. “Hemos trabajado juntos estos meses atrás y lo voy a ver en nada seguro” comentó. Esta ha sido una temporada redonda para Mario, que se llevó también el premio Feroz por su papel en No matarás. En la cinta, el actor de 34 años se mete en un trepidante thriller con el que deja atrás su imagen de ídolo adolescente.