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En el programa anterior, Maestros de la costura 4 sorprendía a todos los espectadores sin expulsar a ninguno de los aspirantes, aunque la final está cada vez más cerca y cualquier fallo puede enviarles a casa sin mayor explicación. 2020 ha sido un año muy complicado para el mundo de la moda. El confinamiento obligaba a cerrar los talleres y a parar la producción, pero muchas firmas cedieron sus espacios para poder fabricar equipos de protección individual (EPI). Para rendir homenaje a todos ellos, el talent de costura proponía como primer reto de la noche que los concursantes confeccionaran uno de estos trajes médicos compuesto por un mono y una mascarilla mientras recibían la visita de Vicky Martín Berrocal, que no se quedó de brazos cruzados y se puso a trabajar. Tras las valoraciones de los jueces, Lluis se alzaba con la victoria de la primera prueba y Mily, que se convertiría más tarde en la octava expulsada, en la cuarta. "Estoy lleno de energía y de felicidad. Me veo muy fuerte para afrontarlo todo", explicaba el catalán.
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Además como recompensa tras siete semanas de esfuerzo, trabajo y dedicación, los aprendices se reencontraban con sus familiares protagonizando los momentos más emotivos de la noche. En la prueba por equipos, los aprendices acudían al taller de Ángel Schlesser, una de las marcas más populares de nuestro país. La firma, que lleva casi 40 años escribiendo la historia de la moda española goza de un estilo muy propio y reconocible, a pesar de que cada temporada sorprende de nuevo. Juan Carlos Mesa, director creativo, sabe lo que es triunfar, ya que Kate, su primera colección, ganaba el premio a la Mejor Colección en la Fashion Week de Madrid. Con sus consejos, los dos equipos debían realizar una réplica de dos vestidos premiados. Después de sesenta minutos de mucha tensión, el grupo verde formado por Ancor, Yelimar (que era capitana por primera vez) y Laura, se convertía en el ganador y sus componentes automáticamente en semifinalistas de la cuarta edición del talent.
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En la prueba de eliminación, los mandiles negros debían confeccionar una prenda de lencería o un conjunto de ropa interior. Durante el reto contaban con las recomendaciones Eduardo Navarrete, finalista de la primera edición de Maestros de la costura, y Jedet, artista y cantante ganadora de un premio Ondas a la mejor interpretación femenina por Veneno. Mily, que había pedido el imperdible dorado para que Ancor la ayudara en la creación de la prenda, sorprendía a los jueces presentando solo el vestido, pero sin la ropa interior, motivo por el que se convertía en la octava expulsada de la temporada y se quedaba a las puertas de la semifinial. "Sin saber las valoraciones de los demás, lo sabía. Sabía lo que había hecho porque no he presentado lo que se pedía", expresaba la participante.
