Simon Baker parece haber puesto al mal tiempo buena cara. El protagonista de El mentalista ha sido fotografiado en muy buena compañía un mes después de haber anunciado su separación de Rebecca Rigg. El actor, de 51 años, ha sido sorprendido mientras disfrutaba de un placentero baño en la bahía de Byron Bay, en Australia, junto a la diseñadora Laura May Gibbs, de 36 años. Unas imágenes que publica la revista People y en las que se puede ver a Simon y Gibbs en actitud muy romántica, sonriendo abrazados y charlando animadamente mientras disfrutan del sol y las buenas temperaturas registradas en el país.
El representante de Baker y el publicista de Gibbs se han negado a hacer ningún tipo de comentario al respecto. Laura May Gibbs es una diseñadora australiana fundadora de de Nagnata, una firma de ropa y estilo de vida de lujo, cuya visión es contribuir a un modelo de negocio más sostenible dentro de la industria de la moda.
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Estas imágenes de Baker y Gibbs han visto la luz un mes después de que la revista People confirmara en exclusiva la separación del protagonista de El guardián. Una inesperada noticia sobre un matrimonio que celebraba 29 años de amor, 22 desde su boda, y tres hijos en común, Stella, de 27 años, Claude, de 22 y Harry, de 19. "Seguimos siendo amigos cercanos y nuestros tres hijos siempre serán el foco más importante de nuestras vidas", fueron sus palabras al anunciar su ruptura.
Baker y Rigg se conocieron a principios de la década de 1990 y protagonizaron juntos la serie australiana E Street. En 1998 se casaron y ella a finales de los años noventa se retiró de la actuación para criar a los hijos de la pareja. Rebecca Rigg ha sido siempre el máximo apoyo del australiano en una carrera que ha ido sumando éxitos. El anuncio de la separación se produjo justo cuando Baker estaba a punto de estrenar su última película, High Ground.