¿Quién quiere ser millonario? se emitió por primera vez en Antena 3 en 2005, presentado por Carlos Sobera y Antonio Garrido, llegando a convertirse en uno de los grandes hitos de la cadena al superar cada tarde el 20% de cuota de pantalla y un promedio de 2.116.000 espectadores. Después de esta etapa en la cadena principal de Atresmedia, se emitió una nueva versión del programa en La Sexta, en 2012, con Nuria Roca como maestra de ceremonias. Para celebrar los 20 años del formato internacional que ha formado parte de la cultura popular de medio mundo y hasta ha inspirado una película, Slumdog Millonaire, Antena 3 recuperaba el concurso la temporada pasada pero con celebrities como participantes y tras su éxito este 12 de marzo a las 22:00 regresa con nuevos rostros conocidos. Pero, ¿cuáles han sido sus mejores momentos en estos años?
Si hay un recuerdo que tendrán grabados los millones de seguidores del mítico concurso es cuando uno de los concursantes, antes de llevarse los 50 millones de pesetas, gastaba el comodín de la llamada solamente para informar a su mujer de que se sabía la respuesta (a la pregunta de qué fruta se obtiene la copra) y que estaba a punto de ganar: "Maribel, te llamaba para decirte que me voy a llevar 50 kilos y era solo para avisarte e informarte". Ella, atónina, no podía creer que él no dudara, pero finalmente estaba en lo cierto y se llevaba el premio final. Y es que las llamadas para intentar acertar dieron para mucho. Con algunos participantes, tras marcar el número y exponer la cuestión que tenían que adivinar, la respuesta no estaba entre las opciones. "¿Qué pizza reproduce los colores de la bandera de Italia? Margarita, San Gennaro, Marinera o Cuatro estaciones", relataba uno de los concursante a lo que sus ayundante al otro lado de la línea respondían: "Napolitana". Finalmente, y por suerte, acertaba con "Margarita".
En otras ocasiones había personajes con muy mal perder y que se enfadaban por no saberse las respuestas o por gastar los comodines: "Lo veo todo muy negro. He gastado el del 50% por idiota. Acuéstate y suda. Luego me vendrá alguien a decir que se la sabía y que eras muy fácil. Sí, claro, tú qué te vas a saber", relataba otro de los concursantes ante las risas de Carlos Sobera. Además, el espacio sirvió también como plató para gastarle una inocentada al presentador. Una participante demasiado pesada y nerviosa estuvo a punto de volver loco al conductor del programa. "Sí, me la pegaron. Hubo un momento en que me di cuenta pero no me atreví a decirlo por si acaso la hubiera liado", confesaba Sobera.
Programa tras programa, el presentador ha tenido numerosos ataques de risa por algunas preguntas comprometidas, pero si hay una que produjo su sorpresa fue la de qué persona o animal puede mover los ojos de forma independiente. El participante dudaba entre Marujita Díaz o el camaleón, por lo que tuvo que pedír la ayuda del público. Tras unos segundos en los que el conductor del programa no daba crédito ante la situación, casi el 90% de los asistentes elegía la opcion correcta del animal ayudando así a pasar al concursante a la siguiente cuestión. Además, el poder de convicción de Sobera provocaba alguna de las situaciones más divertidas. Durante una de las entregas, un concursante que quiso plantarse por no saberse la respuesta finalmente siguió jugando gracias a las palabras del conductor, al que le faltó muy poco para decirle cuál era la correcta.
Los Dispersos celebran con disfraces y mucho humor sus 300 programas en '¡Boom!'
Tras el final de El Desafío, en el que la pasada semana Kira Miró se proclamaba ganadora, ¿Quién quiere ser millonario? aterriza los viernes con nuevas entregas protagonizadas por caras tan conocidas como David Broncano, Aitana Sánchez-Gijón, Ana Milán, Cósima Ramírez, Santiago Segura, Loles León, Eva Hache, Javier Sardá, Espido Freire, Mario Vaquerizo, Miguel Ángel Muñoz o Marta Hazas, entre otros que se atreverán a sentarse frente a Juanra Bonet para intentar hacerse con el millón de euros que tiene de bote del programa. Un dinero que irá destinado a una organización benéfica elegida por ellos mismos.
El también presentador de ¡Boom! relataba en La Sexta que se sentía "eufórico" por volver a conducir esta edición. "Nos dimos cuenta de una cosa y las celebrities también lo subrayaban, que es un concurso que te desnuda, ya que no tienes nada a lo que agarrarte y el participante está solo, sin nadie, jugando con sus inseguridades y con sus propios conocimientos, con su intuición y contra sus nervios", explicaba en Liarla Pardo. "Ellos se daban cuenta de que al estar jugando para un ONG y no para ellos mismos no se atrevían tanto y que les daban ganas de plantarse", revelaba Bonet.