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David Muñoz ha lamentado la muerte de su amigo, el periodista deportivo y exfutbolista Carlos Matallanas. El chef ha compartido una foto del fallecido y un emotivo mensaje de despedida, con "arrepentimiento" incluido. "Así le recuerdo yo. Hoy me siento raro, me siento triste. Fuimos muy amigos de jóvenes y siempre tuvimos cierta conexión. Siempre pensaba en sacar un rato para ir a verte, me acordaba a menudo de ti y de tu lucha. Creo que nunca fui capaz de ir porque prefería recordarte así. Hoy me arrepiento mucho, ya es tarde", ha escrito el prestigioso cocinero. "Siempre has sido un ejemplo de no tirar la toalla y luchar por vivir hasta el pitido final. Nos vemos pronto, Carlos Matallanas", ha añadido.
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El creador de DiverXO ha compartido también uno de los muchos artículos de Matallanas. "Esto tan maravilloso escribías de mí por el 2018. Hoy, leyéndolo, se me ha encogido el corazón", ha confesado Muñoz. En esta publicación de su blog de El confidencial, titulada Mi amistad adolescente con el futbolista David Muñoz, ahora chef estrella", el periodista, que ha fallecido de ELA a los 39 años, hablaba de la visita de su amigo y su donación para la investigación de la esclerosis lateral amiotrófica. Matallanas también recordaba el pasado de ambos como fútbolistas. "David era muy buen futbolista, jugador ofensivo, preferiblemente de banda, rápido, habilidoso, pillo, y tan rebelde y competitivo como sigue demostrando día a día en su profesión, que mucha culpa de su éxito la tendrá seguro su formación deportiva", decía.
Sin embargo, Muñoz -o Chicho, como le llamaban sus compañeros de equipo- lo dejó todo para dedicarse a su verdadera pasión, la cocina, y los caminos de ambos se separaron hasta que a Matallanas le diagnosticaron ELA en 2014. "No había vuelto a contactar con David desde 1999, pero cuando hice pública mi enfermedad, me contactó cariñoso por Twitter. Sabría de mí de repente, que era periodista, que todavía jugaba al fútbol y que me acababa de pasar una putada de las gordas", comentaba, y dedicaba estas palabras de admiración a su amigo. "A mí me queda la experiencia vivida, que entre millares de grandes momentos está haber conocido a Chicho. Un chaval especial, y ahí está su biografía para quien quiera comprobarlo".
A Carlos Matallanas le diagnosticaron esclerosis lateral amiotrófica, ELA, en 2014 y, desde entonces, pasó a ser todo un referente en la lucha contra esta enfermedad. Tan solo un año después, quedó tetrapléjico, pero siempre continuó haciendo frente a la situación con una sonrisa. Por eso decía que “la vida es un juego” y precisamente así había titulado su segundo libro, cuya publicación coincidió con una grave recaída por la que ingresó en el hospital antes de Navidad y que finalmente le ha costado la vida.