Hace unos días que Lydia Lozano volvía a casa para recuperarse de la complicada operación en las cervicales que le estaba afectando a la médula y por la que tuvo ser intervenida. La colaboradora reaparecía por videollamada en Sálvame para explicar a sus compañeros cuál era su estado de salud el pasado 2 de marzo, dejando muy claro que tenía muchas ganas de continuar sus rutinas, de ponerse tacones de nuevo y de retomar su trabajo. Este jueves, tan solo dos días después de sus palabras, volvía al plató del programa de Jorge Javier Vázquez muy contenta con su reincorporación. Pero no regresaba sola, la periodista llegaba sentada en una silla ergonómica con ruedas empujada por Víctor, al que el espacio ha identificado como su cuidador personal. "Que sepáis que me he operado solamente para tener esta silla, que la llevaba pidiendo desde Navidad. Vamos a ver, me voy a levantar porque yo puedo andar. De verdad que yo puedo sola sin problema", comenzaba diciendo la madrileña.
Lydia Lozano recibe el alta y bromea sobre su operación de cervicales: '¿No me veis más alta?'
Víctor continuaba empujando la silla de la periodista hasta casi su su sitio y ella, al ver a Mila Ximénez por primera vez desde hace unas semanas, le revelaba que le encantaba su nuevo look: "Es ideal. Me encanta verte y estás genial. Estás estupenda y lleva lo que tú quieras". Pero no solo eso, Lydia se atrevía a bailar un poco en medio del plató del programa de Mediaset para demostrar a todos sus compañeros que están en plenas condiciones tras la cirugía. Aunque más cauta que de costumbre en sus movimientos, Lozano movía sus brazos, rodillas y cogía su vestido para intentar dar algunos pasos, pero reconocía no hacerlo con la misma soltura y salero por la que se le reconoce normalmente. "No, hoy no me voy a mover mucho". La periodista volvía a su nueva silla y el presentador y Kiko Matamoros bromeaban con ella para quitar seriedad a su operación. "Ahora tienes la espalda de Mireia Belmonte", explicaban entre risas.
Lydia Lozano se derrumba al hablar de cómo la pandemia le está afectando
"Estás espectacular. Cuatro días que has estado descansando y se te nota en la cara", revelaba el presentador a su compañera. Sin embargo, si alguien causaba sensación en el plató era su cuidador, quien confesaba a Jorge Javier que le daba mucha vergüenza hablar en directo. Y aunque el presentador intentaba emparejar al trabajador cubano de 35 años con la colaboradora, él expresaba que aunque estaba soltero solo iba a cuidarla. Pero además, mientras estaba sentada en su nueva silla y explicaba las placas que le han tenido que poner durante la operación, también se atrevía a dar algunos pasos de salsa que le había enseñado Víctor. Eso sí, esta vez Lydia no ha hecho referencia sobre el hecho de que su altura haya aumentado en un centímetro y medio como consecuencia de cómo ha influido la intervención en sus vértebras, tal y como mostró a través de las radiografías del antes y el después. Un tema con el que ella misma ya bromeó con la prensa a la salida del hospital, preguntando a los periodistas: "¿No me veis más alta?"