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El fallecimiento del actor Quique San Francisco ha conmocionado al mundo de las artes escénicas de nuestro país y han sido muchos los artistas que han querido rendirle homenaje de manera pública. Uno de ellos ha sido Pablo Motos, quien ha logrado emocionar a la audiencia de El Hormiguero en un inicio de programa repleto de sentimientos y marcado por unas bonitas palabras dedicadas al actor. Un discurso en el que el valenciano ha ensalzado la figura de Quique San Francisco, su peculiar y alegre personalidad, así como su inmensa trayectoria profesional, además de compartir alguna anécdota con el público. Visiblemente emocionado, Pablo Motos decía despidiéndose de su amigo: "Enrique era un genio y un sabio. Era el mejor."
- Quique San Francisco, genio y figura
© Atresmedia"Esta noche lo vamos a pasar en grande pero antes me vais a permitir que haga una excepción porque tengo que empezar con una noticia muy triste. Esta tarde se ha muerto mi amigo Enrique San Francisco y quiero hablar de él", así arrancaba el programa el presentador de El Hormiguero, echando la vista atrás hacia todos los recuerdo que ha compartido con el actor, fallecido el lunes 1 de marzo a causa de una neumonía. "A mí Enrique me enseñó a estar en un escenario, me enseñó a sobrevivir en Madrid, me enseñó a entender a los artistas y también me enseñó hasta qué extremo una persona puede ser libre. Tú puedes ir a trabajar, puedes tener un horario, puedes obedecer a tu jefe o no. Si no te da la gana, no, y a Enrique no le daba la gana. Y como era libre, eligió vivir por el lado salvaje de la vida", continuaba.
- La última entrevista de Quique San Francisco días antes de fallecer
Como otros tantos rostros de la televisión y las artes, como Rosario y Lolita Flores, Edurne, Antonio Carmona, Manel Fuentes, María José Cantudo y un larguísimo etcétera, Motos ha hecho hincapié en el gran carisma del actor, que comenzó su trayectoria profesional con apenas seis años de edad: "Los que estábamos cerca de él, nunca nos aburríamos (…) Enrique era un genio y un sabio. Era el mejor", decía sin poder disimular su emoción. "Todos queríamos a Enrique, porque te hacía sentir debilidad por él. Y por ahí entraba y te robaba el corazón para siempre. Enrique era noble, era buena persona, era solidario y era muy valiente. Delante de él jamás se cometía una injusticia. Le daba igual perder el trabajo o meterse en un pelea. Jamás nadie cometió una injusticia en su presencia porque Enrique también era un héroe", continuaba deshaciéndose en halagos hacia su amigo.
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© AtresmediaUna forma de ver la vida, sin miedo y con la intención de aprovechar cada segundo al máximo, que quedó reflejada en uno de sus últimos trabajos, el anuncio de la pasada Navidad de Campofrío, en el que se rendía homenaje a las víctimas de la pandemia y en el que Quique San Francisco aparecía caracterizado como la propia muerte. Un proyecto al que Pablo Motos también ha querido hacer referencia: "Y ahora se ha marchado con esa elegancia que fue siempre su firma y todos le recordaremos con la imagen más impresionante de esta Navidad, Enrique con su capa y su guadaña riéndose de la muerte. Seguramente esa fue su última gamberrada."
Todo, en un aplaudido discurso del valenciano en el que tampoco ha querido dejar a un lado la importante carrera interpretativa de San Francisco, a quien ha calificado de "leyenda". "Durante todos estos años no he conocido a nadie que se haya cruzado cinco minutos con Enrique que no te cuente después una historia alucinante. A Enrique la vida le dio libertad, aventura y un cuerpo y un espíritu indestructibles", concluía el presentador antes de dar paso a El Hormiguero con la intención de, como aseguraba querría Quique San Francisco, divertirse en su nombre.
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