Ha pasado el ecuador del embarazo y se prepara para ese deseado momento que marcará un punto de inflexión en su vida, pero lo cierto es que la maternidad no es el único cambio de María Adánez este año. La actriz ha iniciado un nuevo capítulo estrenando casa. En medio de la dulce espera la protagonista de títulos como La que se avecina, Aquí no hay quien viva, Pepa y Pepe, Amar es para siempre o Maitena: Estados alterados ha hecho las maletas para instalarse en un nuevo hogar en el que próximamente se completará su felicidad ya que con el nacimiento del pequeño Claudio pasarán a ser tres (o mejor dicho cinco, teniendo en cuenta a sus dos gatos, MariGaila y Séptimo, quienes forman parte de la familia).
Para ti que te gusta
Lee 8 contenidos al mes solo con registrarte
Navega de forma ilimitada con nuestra oferta
1 año por 49€ 9,80€
Este contenido es solo para suscriptores.
CelebramosSuscríbete 1 año por 49€ 9,80€
Este contenido es solo para suscriptores.
CelebramosSuscríbete 1 año por 49€ 9,80€
TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
-La divertida advertencia de María Adánez a su bebé: 'Estos son los padres que te esperan'
-¡La dulce espera! María Adanez luce embarazo paseando enamorada por Madrid
Ha sido la propia intérprete, galardonada con un premio Ercilla y otro de la Unión de Actores, quien ha compartido emocionada una foto en la que muestra un rincón de su recién estrenado hogar: una claraboya que llena de luz las estancias. "Casa nueva, vida nueva.... Cambios, ilusión", ha dicho María, que se convertirá en mamá por primera vez esta primavera al lado de Ignacio Hernández Medrano, el neurólogo con el que mantiene una discreta relación. En este domicilio en el que se acaban de instalar podrán empezar a preparar la habitación de Claudio, su cuna, su carrito, su bañera... Y es que en unas semanas, cuando tengan a su bebé en brazos, esta vivienda se llenará de juguetes, biberones, chupetes... pero sobre todo, de inmensa alegría.
María no solo dio en diciembre la noticia de su embarazo sino que desde entonces comparte emocionada todos los avances y los sentimientos que la invaden según se acerca el momento de ver la carita de su primogénito. "La tripa ya empieza a tomar un tamaño considerable, proporcional a mi estado de felicidad e ilusión. !Vivan las hormonas¡ Y viva el viaje de sentir cómo un bebé crece dentro de mí cada día, qué fuerte", comenzaba a decir recientemente. Además, a juzgar por sus palabras, parece que Claudio apunta maneras para seguir los pasos profesionales de su mamá sin ni siquiera haber nacido aún. La actriz contaba que durante una visita al teatro notó especialmente cómo se movía.
La actriz madrileña de 44 años (cumplirá 45 en marzo) se mantiene muy activa durante el embarazo. No solo da paseos por la capital, disfruta de planes culturales y aporta su granito de arena a iniciativas solidarias (ha cocinado para una asociación que da de comer a personas que viven en la calle), también sigue una disciplina de ejercicios similar a la de otras premamás como Paula Echevarría. Conecta con su bebé gracias a la música clásica puesto que usa una lista de reproducción de Mozart para transmitir paz y tranquilidad Claudio. Además, tanto ella como Nacho (así se refiere a su pareja) cantan a la barriguita a diario. María vive esta etapa con alegría y con enorme curiosidad. Tal y como ha explicado, tanto ella como todos sus seres queridos se preguntan a quién se parecerá el bebé, cómo será su personalidad, qué rasgos heredará de sus papás..
Una discreta historia de amor
Han pasado más de cuatro años desde que María y el doctor Hernández Medrano comenzaron su historia de amor, una relación en la que están a punto de dar el importante paso de formar una familia. La actriz, que anteriormente compartió su vida con Alberto Caballero o David Murphy, define a su pareja como "un hombre sensible, inteligente y divertido". Ambos han apostado por vivir su romance lejos del foco mediático pero se apoyan incondicionalmente en sus respectivas carreras. En 2017 acudían juntos a los premios Miguel Mihura de Teatro (ella estaba nominada) y dos años más tarde hacían lo propio en Barcelona, donde él recogía el Premio Princesa de Girona (la princesa Leonor asistía por primera vez) en la categoría de Empresa por las plataformas Savana y Mendelian, dedicadas a la investigación.