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Miguel tiene casi dos años y se ha convertido en el mejor alumno de su padre, Fernando Verdasco, que comprueba con orgullo que tiene en casa su mejor relevo en las pistas. No es raro que el deportista muestre las anécdotas que protagoniza su hijo mayor que le ayuda a recoger las pelotas o se pone a dar toques con su pequeña raqueta. La última ocurrencia de Miguel ha sido colarse en la pista mientras su padre estaba en pleno entrenamiento, un divertido gesto espontáneo que ha quedado inmortalizado por el deportista. “Alguien quería ocupar mi lugar durante el entrenamiento” escribió divertido.
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Ana Boyer y Fernando Verdasco cumplen tres años de casados
La risa contagiosa de Fernando Verdasco y Ana Boyer con su hijo Miguel
Fernando y Ana Boyer han regresado con sus dos hijos, Miguel que en marzo cumple un año, y Mateo, de solo un mes y medio, a Doha, donde tienen fijada su residencia. Es allí donde Fernando ha retomado sus entrenamientos después de un año 2020 marcado por la suspensión de las competiciones debido a la pandemia. Es en estas sesiones donde se ha visto el lado más travieso de Miguel, que no duda en acompañar a su padre para ayudarle a recogeré el material que utiliza. Después de una intensa jornada de trabajo, la familia disfruta de las puestas de sol en el paseo marítimo por el que Miguel corretea ante la atenta mirada de sus padres.
Su mejor regalo
Fieles a su discreción, el matrimonio apenas ha compartido imágenes de su segundo hijo, que nació el pasado 21 de diciembre (se le ha podido ver durmiendo tranquilo en su cochecito y también en brazos de su padre). Con él han dejado atrás, como resumía Fernando, un año "durísimo en lo que al tenis se refiere, con lesiones, pocos torneos jugados, pocos días de entrenamientos realizados por culpa de esas lesiones, malas sensaciones, e injusticias como la de Roland Garros, la cual me ha afectado mucho mentalmente y anímicamente".
Ana Boyer, Verdasco y su 'compañero de dobles' disfrutan de las increíbles puestas de sol de Doha
Recuperan ahora en Doha su rutina familiar que, antes de la pandemia, estaba marcada por los viajes que hacían a los diversos torneos del programa. A estos se unirá ahora Mateo seguro, un talismán más para el tenista que aseguró poco después de ser padre de nuevo que el benjamín de la familia había sido su "mejor regalo de Navidad".