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Ana Boyer y Fernando Verdasco han regresado a Doha. Después de muchos meses viviendo en Madrid en casa de Isabel Presyler debido a la pandemia, el tenista y su esposa han regresado a su hogar, donde tienen fijada su residencia y comenzó su vida de casados. La pareja tiene una fabulosa casa cerca del desierto y hasta allí han viajado junto a sus dos hijos, Miguel, de 22 meses, y Mateo, de apenas mes y medio de edad. Ha sido en esta ciudad donde hemos podido ver a la familia dando un idílico paseo al atardecer. "Caminando por la perla", publicó Verdasco junto a una foto de su hijo Miguel paseando junto al paseo marítimo. La perla es una de las islas artificiales de Qatar llamada así al ser este país uno de las principales comerciantes de la perla en Asia.
© ferverdascoVestido con ropa deportiva, sudadera con capucha, pantalones y zapatillas, el niño ha hecho las delicias de los miles fans de Fernando y ha recibido comentarios cariñosos también de su familia. Su tía Sara Verdasco no podía evitar comentar la foto: "Mi niño❤️", decía al verle, mientras que Ana, la hermana más pequeña del jugador, se refería a él como "mi ratón ?".
Horas más tarde era Ana Boyer la que publicaba unas imágenes paseando con el carrito de su bebé, Mateo, en el mismo y paradisíaco lugar de Qatar. El matrimonio vuelve a casa convertidos en padres de dos niños. El pequeño Miguel, que el próximo mes de marzo cumplirá dos años, y Mateo, que vino al mundo el pasado 21 de diciembre para llenar de felicidad aún más su hogar. La pareja, fiel a su discreción, apenas ha compartido imágenes de su segundo hijo, al que ahora podemos ver acurrucado en el carrito de paseo, aunque Fernando hace unos días publicó una foto junto a Mateo, en la que se podía apreciar parte de la carita del bebé, que ya ha cumplido mes y medio.
© anaboyerEl propio Fernando compartía a finales de 2020, que el benjamín de la familia había sido su "mejor regalo de Navidad". Con él han dejado atrás un año "durísimo en lo que al tenis se refiere, con lesiones, pocos torneos jugados, pocos días de entrenamientos realizados por culpa de esas lesiones, malas sensaciones, e injusticias como la de Roland Garros, la cual me ha afectado mucho mentalmente y anímicamente. Pero voy a mirar hacía delante". Durante estos meses tan complicados, el deportista español ha contado con el apoyo incondicional de su familia, especialmente de su mujer, que ha estado a su lado en todo momento.
Hasta que comenzó la pandemia estabamos acostumbrados a ver a Ana Boyer junto a su marido, el tenista Fernando Verdasco, y su hijo Miguel viajar por todo el mundo, siguiendo los torneos en los que él participaba. Uos viajes que se vieron aplazados no solo por la crisis sanitaria, sino también por su operación de rodilla de la que, afortunadamente, se recupera sin problemas. Hoy, un mes y medio después del nacimiento de su segundo hijo, la familia ha vuelto a casa siendo uno más y juntos celebran el Día Nacional del Deporte en Qatar.
El bonito gesto de Ana Boyer y el pequeño Miguel para apoyar a papá Verdasco
