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Empresas, propiedades, millones…Aun no hay una decisión, ni ellos se han pronunciado pero, para muchos, el divorcio de Kim Kardashian y Kanye West está cerca. Lo cierto es que la mediática pareja no se ha dejado ver tras el 40 cumpleaños de la estrella televisiva, en octubre, cuando en una fiesta en la Polinesia francesa, el rapero le regaló a su mujer un holograma de su padre, fallecido en 2003. Desde entonces, ni fotos juntos, ni dedicatorias en redes…ni Kim lleva ya su anillo de boda. West ha estado viviendo en su rancho de Wyoming mientras que Kim se quedó en California con los cuatro hijos del matrimonio, North, de siete años, Saint, de cinco, Chicago, de tres y Psalm, de un año.
© GettyImagesLa prensa estadounidense se prepara ya para el que será, sin duda, uno de los divorcios del siglo. En juego… un inmenso imperio de más de dos mil millones de euros y sus cuatro multimillonarias mansiones, entre ellas la casa familiar, valorada en 40. Al parecer, la estrella de Keeping Up with the Kardashians (el reality que hizo famoso al clan, encara su última temporada) ya está en manos de la todopoderosa Laura Wesser, la abogada de los famosos, que también la representó en su ruptura con el jugador de baloncesto Kris Humphries, y letrada de los procesos más conocidos de Hollywood.
El divorcio de Kim Kardashian y Kanye West tras casi siete años de matrimonio (y diez juntos), no es el único que haría temblar los cimientos –y la caja fuerte- de una gran fortuna. Solo en las últimas dos décadas, el listado de parejas (y millones repartidos) que encabezan el ranking de los divorcios más caros del siglo XXI, nos deja nombres del mundo empresarial, deportivo y la industria del entretenimiento.
© GettyImagesJeff Bezos y MacKenzie Scott
Tras veintiséis años de matrimonio el acuerdo al que llegaron el multimillonario fundador de Amazon, Jeff Bezos y su mujer, la escritora MacKenzie Scott, la convirtió en una de las mujeres más ricas del mundo. Su divorcio ostenta el récord de ser el más caro de la historia. Casados desde 1993, antes de la creación del gigante del comercio, y padres cuatro hijos, la pareja anunció su ruptura el 9 de enero de 2019. Poco después, se conocieron algunos detalles del consenso económico de la pareja, que había contraído matrimonio sin acuerdo prenupcial. En el momento del divorcio, disponían del 16 por ciento de las acciones de la compañía que fundaron juntos; Bezos, el hombre más rico del mundo (Forbes estima su fortuna en 117 mil millones de dólares en 2020) se quedó con el 75 por ciento de las mismas –es decir el 12 por ciento de Amazon- además de sus intereses en el periódico The Washington Post y la empresa de viajes espaciales Blue Origin.
© GettyImagesSu ex mujer pasaba a controlar el 4 por ciento restante, valorado en 35 mil millones de dólares (unos 32 mil millones de euros). Eso sin contar el vasto patrimonio en propiedades que repartieron, sin que hayan trascendido los detalles: el hogar familiar en Medina, a las afueras de Seattle, valorado en 62 millones de euros, un terreno de 1.200 kilómetros cuadrados en Texas, dos casas en Beverly Hills, cuatro apartamentos cerca de Central Park, en Nueva York, y una vivienda en Washington. Solo en el último año, MacKenzie ha donado más de 6 mil millones a asociaciones benéficas. “El año pasado me comprometí a devolver la mayor parte de mi riqueza a la sociedad que ha ayudado a generarla” señalaba la escritora recientemente.
Rupert Murdoch y Anna María Torv
En 2013 el magnate de los medios de comunicación Rupert Murdoch se divorciaba de su tercera mujer, Wendy Deng. Para entonces, había blindado su fortuna, estimada en 9 mil millones, después de que el anterior divorcio, de Anna María Torv, con quien estuvo casado treinta y dos años y tuvo tres hijos, le costara 1.700 millones de dólares (110 en efectivo), en 1999. El acuerdo con Deng, madre de sus hijas Grace y Chloe, nunca transcendió, pero sí se sabe que mantuvo el lujoso tríplex, de más de quince habitaciones, en la Quinta Avenida de Nueva York, y la casa que Murdoch, ahora casado con Jerry Hall, compró y reconstruyo en Beijing, en 2004, para su entonces esposa.
© GettyImagesHarold Hamm y Sue Ann Arnall
Justo por debajo de la barrera de los 1.000 millones de dólares, se sitúa la larga batalla judicial que enfrentó al magnate petrolero Harold Hamm con su segunda mujer, Sue Ann Arnall. Iniciaron los trámites en 2012, pero no fue hasta 2015 cuando el multimillonario estadounidense se vio obligado a desembolsar 975 millones de dólares a su exmujer, de su fortuna estimada en 18 mil millones. Fue uno de los divorcios más mediáticos que se recuerda en EE.UU.
Steve y Elaine Wynn
Por su parte, Steve y Elaine Wynn se casaron en dos ocasiones, pero ninguna de ellas funcionó. En marzo de 2010, el magnate de los casinos de Las Vegas solicitó por segunda vez el divorcio, que se saldó con los 741 millones de dólares que pagó a su ex mujer en acciones de su compañía, Wynn Resorts. Elaine pasó así a ser miembro de la junta y principal accionista.
Bernie Ecclestone y Slavica Radic
El divorcio, en 2009, de Bernie Ecclestone, de noventa años, y su segunda mujer, la modelo croata Slavica Radic, de sesenta y dos, con la que estuvo casado veinticinco años, está en el top de las cinco rupturas más caras de la historia (no solo del siglo XXI). Le costó al entonces jefe de la F1 670 millones de dólares. Contrajeron matrimonio en 1985 y juntos tuvieron dos hijas, Petra, de treinta y dos años, y Tamara, de treinta y seis. El empresario tiene otra hija, Deborah, de sesenta y cinco, de su primer matrimonio con Ivy Bamford, y el año pasado, con ochenta y nueve, fue padre por cuarta vez de un niño llamado Ace, nacido de su unión con la directora de marketing brasileña Fabiana Flosi, de cuarenta y cinco.
© GettyImagesDmitri Rybolóvlev y Elena Rybolóvleva
Y, durante un tiempo, encabezaron el ranking mundial de divorcios más caros el magnate ruso Dmitri Rybolóvlev, propietario del club de fútbol As Mónaco, y su mujer y socia Elena Rybolóvleva. Se separaron en 2008, tras veintiséis años de matrimonio. Seis años después, en 2014, un tribunal suizo condenó a Dmitry a pagar 4.800 millones de dólares a su ex. Una cifra astronómica que, en 2015, el mismo tribunal revocó y redujo a 600 tras un supuesto acuerdo amistoso entre la pareja. Aún así, el empresario ruso tuvo que desprenderse de algunas de sus posesiones más valiosas, entre ellas, el cuadro ‘Salvator Mundi’ de Leonardo Da Vinci, que fue subastado en Christie’s por 450,3 millones de dólares.
Roman Abramovich y Vyacheslavovna Malandina
Otro empresario ruso en el listado, es Roman Abramovich, a quien sus sagaz visión en los negocios no le acompaña en el amor. Divorciado en tres ocasiones, su segunda mujer, Irina Vyacheslavovna Malandina, madre de cinco de sus hijos , recibió unos 200 millones de euros tras la ruptura. Con su tercera mujer, Dasha Zhurkova, a quien conoció antes de divorciarse de la segunda, el magnate, con una fortuna estimada en 9 mil millones, ha tenido dos hijos y varios negocios en común, entre ellos, la firma de moda Kova & T. Los términos de su divorcio en 2017 no han trascendido, también se desconoce si había acuerdo prenupcial, pero entre las propiedades en juego se habló del Chelsea FC, el fondo de inversiones Milhouse LCC, varias mansiones y coches de lujo y el yate Eclipse, el segundo más grande del mundo. Zhurkova, nacida en Moscú posee su propia fortuna, que heredó cuando falleció su padre, magnate del petróleo.
© GettyImagesMel Gibson y Robyn Moore
Por debajo de los 500 millones de dólares, encontramos el divorcio de Mel Gibson y Robyn Moore. Sin ningún acuerdo prenupcial al que recurrir, el actor tuvo que darle a Robyn la mitad de sus ganancias, es decir, 425 millones. Sigue siendo, a día de hoy, el más caro de la historia de Hollywood. Fue en 2011 cuando le estrella de ‘Bravehart’ y su mujer y madre de sus siete hijos mayores, pusieron fin a treinta años de matrimonio y una historia de amor que comenzó en los setenta cuando Gibson acudió a la consulta de un dentista donde ella trabajaba como enfermera.
De Adele a Paul McCartney
La ruptura de Adele llena estos días las página de los medios internacionales. Con el mismo secreto con que mantuvo su romance y boda con Simon Konecki, el padre de su hijo Angelo, la cantante podría haber saldado el divorcio, en 2020, con 171 millones de dólares, al menos eso es lo que se ha publicado. Aproximadamente 170 millones fueron los que se estima recibió no hace mucho María Shriver, sobrina del presidente Kennedy, la mitad de la fortuna que Arnold Scharzenegger amasó durante sus veinticinco años de matrimonio. La ruptura llegó en 2011, después de una historia de película en la que Terminator reconoció un hijo secreto –Joseph Baena- con una empleada de hogar que había trabajado en su casa, pero en 2018 aún no se habían divorciado oficialmente intentando llegar a un acuerdo. En Hollywood le siguen (en ese siglo XXI), el divorcio de Tom Cruise y Nicole Kidman, en 2001, valorado en unos 90 millones de dólares, y Paul McCartney, que pagó 48 millones a Heather Mills de los 170 que solicitaba la modelo.
© GettyImagesMichael Jordan y Juanita Vanoy
El que para muchos es el divorcio más caro de la historia de un deportista lo protagonizó Michael Jordan a finales del año 2006. Su separación de Juanita Vanoy llegó con un acuerdo por el que el considerado mejor jugador de la historia del baloncesto pagó unos 243 millones de dólares a la madre de sus tres hijos, Jeffrey Michael, Marcus James, y Jasmine. Y siguiendo con el mundo del deporte, a Tiger Woods su escándalo de infidelidades, no sólo le salió muy caro mediáticamente, sino que también propició la separación de su esposa Elin Nordegren, y un acuerdo de divorcio que alcanzó aproximadamente los 145 millones de dólares. Se casaron en octubre de 2003 en Barbados, en una ceremonia con 200 invitados, de su unión nacieron sus dos hijos. Firmaron el divorcio el 23 de agosto de 2010, aunque ya llevaban casi un año separados.
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