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imanol arias© Félix Valiente

En pleno éxito de la temporada 21 de ‘Cuéntame como pasó’

Entrevistamos a Imanol Arias: ‘Mi vida hoy es muy tranquila. El ansia de expandirme ha disminuido. Estoy más dedicado a cuidarme y a respirar’

El actor nos habla de su vida en esta etapa, de cómo se cuida y de lo orgulloso que está de sus hijos, Jon y Daniel, que siguen sus pasos


30 de enero de 2021 - 14:53 CET

“La parrilla estaba preparada para hacer una temporada centrada en el año de las Olimpiadas (1992), vivir el cómo hubiera sido el sueño de la familia Alcántara en ese contexto, pero el incidente de la COVID hizo que desde la productora se plantearan tener una visión del 1992 pero vista desde hoy. Esto hizo que hubiera un cambio sustancial que revolucionó todo el planteamiento. Ayudó muchísimo la época del confinamiento, y pudimos llenar todo ese tiempo de ideas para poder estar a la altura” nos cuenta Imanol Arias  sobre la nueva temporada, la número 21 nada menos, de  Cuéntame como pasó , la serie del Grupo Ganga, la más longeva de la televisión, que celebrará el 13 de septiembre el 20 aniversario de la emisión de su primer episodio. Hablamos con Imanol Arias de Antonio Alcántara, de su vida hoy, en esta etapa, de cómo se cuida y de sus hijos, Jon y Daniel, que siguen sus pasos.

Llevas veinte años dando vida a Antonio Alcántara ¿Qué sigues encontrando y descubriendo en él para que quieras continuar su andadura?

Seguir estando vivo en el trabajo y seguir descubriendo los elementos que te ofrece el guion e insertarlos en tu personaje, en todo el trabajo. Lo que me hace continuar es el compromiso de continuar. Seguir con el personaje hasta que se decida. De manera paralela, esto mismo es lo que no me hace bajar la guardia, ayuda estar comprometido, ya que hace que mi experiencia y mi capacidad de trabajo se vean centradas en el proyecto.

¿Y no te han dado ganas alguna vez de ‘liberarte’ de Antonio?

Sí, me han dado ganas y visto desde ahora es normal, ya que son 20 años viviendo en la piel de Antonio Alcántara. Este trabajo a veces es intermitente, hay que compaginarlo con un rodaje de una película, o con una obra de teatro, viajes…etc y eso hace que a veces le restes importancia o valor a lo que estás haciendo. Son ciclos que hacen que el trabajo tenga la importancia justa. Si cada trabajo se entiende como un paso más, se vive con más ganas de hacerlo y la motivación por sacarlo adelante es mayor. Sí, en algunos momentos he sentido esa necesidad de cómo quitarle importancia a este trabajo que es tan único, para que no me atrape y me quede ahí colgado.

Imanol Arias© Félix Valiente
Imanol Arias lleva dos décadas ‘viviendo’ en la piel de Antonio Alcántara.

¿Cómo es el Antonio que comenzó y como es el de ahora? Siempre has dicho que se parece a tu padre ¿a medida que pasa el tiempo le has dado más rasgos suyos?

Sí. El Antonio de antes y el de ahora son el mismo con el tratamiento camaleónico que tiene el personaje. Antonio Alcántara es carismático a la inversa. No es un personaje carismático que influya o inspire a los demás. El carisma de determinadas personas en la sociedad le sitúa a él donde debe estar, entonces aspira a ese carisma y eso le va situando. Por eso tiene una vida necesaria en guion y una vida muy peculiar en ascensos y descensos. Los rasgos de mi padre en algún momento fueron muy coincidentes, al principio en paralelismos de carrera profesional etc… pero sobre todo Antonio y mi padre reaccionan igual ante determinadas situaciones, es ahí donde sus coincidencias son mayores.

Y más interesante aún…¿cómo es el Imanol que comenzó en ‘Cuéntame’ y el Imanol de hoy?

Es la misma persona después de un viaje muy largo, los aciertos se han afirmado y los errores se han hecho más grandes, porque el tiempo hace que vivas el espacio en función del tiempo. El tiempo pasa muy rápido cuando uno tiene miedo y muy lento cuando uno espera algo. En esa relación me considero una persona que ha agotado etapas de felicidad y búsqueda, y la conclusión a la que he llegado para decir cuál es exactamente la diferencia, es que me he situado en una posición en la vida en la que lo fundamental es tener una conexión con mi presente, tener una conexión real, no atiborrarme de información, ni de arte, ni de literatura, ni de amigos y ser mucho más incrédulo y no malgastar energías en batallas. Cuando empecé ‘Cuéntame’ estaba en la batalla: creando, trabajando, llevando adelante a mi familia, criando a mis hijos… viviendo una etapa muy feliz y muy activa y ahora quiero estar más en una etapa más entera, más presente, más sincera, que me permita vivir mi vida de una manera más directa y con más tiempo.

“Ante las dificultades me crezco, porque me doy muy poca importancia. He contado la vida más bonita de como realmente la he vivido. Siempre he intentado que la vida tuviera un sentido. Soy muy prudente”

¿Veinte años no es nada, como dice Gardel?

Gardel lo dijo, pero alguien lo escribió y el verdadero responsable es el autor. En definitiva, Gardel le pone voz a una canción maravillosa con una música estupenda. El autor que escribió esa frase vivió esos 20 años en Paris, no en Buenos Aires, entonces claro a lo mejor se dice que en París 20 años no es nada –ríe- pero, en el resto del mundo, 20 años son ¡20 años!

¿Cuál ha sido el momento más duro y el más bonito en este tiempo?

El más bonito en este tiempo fue el nacimiento de mi segundo hijo, Daniel, que coincidió con el arranque de la serie, lo recuerdo muy feliz. Lo más duro es enfrentarse mediáticamente a los problemas.

Cuando se apagan las luces de plató…¿los ‘Alcántara’ siguen siendo una familia?

Sí, una familia disfuncional, porque nos vemos mucho tiempo durante el rodaje y desarrollamos relaciones familiares, y fuera ya no nos vemos tanto, entonces nos convertimos en una familia Zoom, una familia de comunicación digital. Tenemos nuestro propio chat. Lo que sí hay, es una aceptación de cómo nos queremos cada uno, que eso es una de las cosas que más se parece a una familia.

¿La amistad con Ana Duato es imprescindible para ti?

Ana es una de las personas imprescindibles en la amistad. Ana es una parte importante de mi vida, es una joya.

Imanol Arias© Félix Valiente
“Mi vida hoy es muy tranquila. El ansia de expandirme ha disminuido. Estoy más dedicado a cuidarme, a respirar…”, nos dice Imanol.
Tener a Irene a mi lado me ayuda a estar más presente, es un pilar importante que me ayuda a conectar más con este momento actual. Me da la paz que necesito para respirar, forma parte latente de este momento.

¿Cómo ha sido para ti 2020 y qué esperas de 2021?

Para mí, como para todos, este 2020 ha sido un gran revolcón, hay que ver quién cae en terreno duro, quién cae en piedra, quién cae en barro (que ya es más mullido) o quién cae en un campo de alfalfa enorme que es más cómodo. Es un año que nos ha situado en nuestra pequeñez, en nuestra alerta, ya que estas cosas que suceden tienen todas un origen, vienen de lejos, y luego además, como todo, esto ha coincidido con un momento en que todo apuntaba a un cambio de paradigma en el trabajo (teletrabajo), el desarrollo de la red, el 5G… etc, parecía que todo es uno. Espero que el 2021 sea un año de cambio de paradigma y una desconexión con el circo del espectáculo rápido en todo.

¿Ante las dificultades eres una persona que se crece o se amilana?

Me crezco porque me doy muy poca importancia. He contado la vida más bonita de como realmente la he vivido. Siempre he intentado que la vida tuviera un sentido. Soy muy prudente.

¿Con la edad llegan menos proyectos o los actores lo tenéis mejor que ellas?

Siempre llegan algunos proyectos a la vez… Pero la edad hace que la presencia de los personajes se circunscribe, es decir, el protagonismo de la ficción tiene una edad concreta, es la que es más presente. Los actores lo tenemos un poco mejor que ellas en general, pero no tanto por lo que se dice de la edad o la belleza de las actrices, que la mayoría a partir de los 40, las que son guapas están guapísimas, las que son interesantes, siguen siéndolo, y las que son feas y guapísimas a la vez (porque esa “fealdad” las hace tener un instrumento de transmisión poderoso) siguen siéndolo. Es la tendencia general de la sociedad, lo mismo que desafortunadamente no nos regimos por un 50%-50%, en la profesión tampoco, y eso lo sufren las mujeres, como en el resto de la sociedad.

Encuentro refugio en la soledad, me relaja y me alivia. Sobre todo a horas en las que la gente duerme. Me permite tener un tiempo largo para mi antes de empezar el día.

¿Cómo es tu vida hoy fuera de los platós, las luces y las cámaras?

Muy tranquila. El ansia de expandirme ha disminuido. Estoy más dedicado a cuidarme, a respirar… Estoy en una etapa de mucha lectura, dedico mi tiempo a estudiar teatro, cosas que me faltaban, como la creación o como desarrollar un texto. Haga lo que haga intento respirar, no pensar en el mañana y, sobre todo, olvidando el ayer. Tener a Irene a mi lado me ayuda a estar más presente, es un pilar importante que me ayuda a conectar más con este momento actual. Me da la paz que necesito para respirar, forma parte latente de este momento.

¿De qué te gusta llenar ahora tu mochila vital…y qué, sin embargo, has aprendido a ir soltando con los años porque se ha convertido en lastre?

He desarrollado mucho mis relaciones en el trabajo, tenía una enorme necesidad de estar siempre trabajando, daba igual que fuera en diversas cosas (peli, cursos,.. etc) eso es lo que llenaba mi mochila, me hacía sentir dentro de la profesión. Quería estar constantemente aprendiendo. En lo artístico, la inquietud y seguir con ganas de aprender conforma una forma de ser. Al final, terminas teniendo una personalidad concreta. Lo que no llevo en la mochila es... esto mismo.

Cuéntame cómo pasó© TVE
‘Cuéntame como pasó’ es la serie más longeva de la televisión.
Ahora quiero vivir la vida de una manera más presente, menos actuada (fuera de lo socialmente artístico)”

¿Cómo viviste el confinamiento?

Muy tranquilo, en casa, confinado. Pendiente de cómo aprender a cuidarnos de esto porque teníamos que empezar a trabajar inmediatamente después, tanto en teatro como en la serie, y eso ha comportado un protocolo estricto que he seguido a rajatabla. No he salido apenas, de hecho sigo sin salir (más que para lo estrictamente necesario) y trabajo con mucho protocolo.

Tu te cuidas mucho Imanol ….¿tu elixir de la juventud es un secreto de estado o se puede compartir?

Cada día creo menos en eso. Sí es cierto que cuido mucho mi salud. Soy bastante tiquismiquis con la comida, no me gusta lo muy graso, ni lo muy fuerte, me gusta mucho el producto fresco. No comía mucha fruta y para compensarlo me hago zumos (litros y litros) y así es cómo he encontrado la manera de tomarla. Respirar para mi es vital, me inspira, es mi motivo de vida.

¿Te has cuidado especialmente en estos momentos de pandemia?

En algunos aspectos sí, me refiero a estar en casa encerrado cumpliendo las normas. Pero, es cierto que ha habido días en los que he fumado más de la cuenta, otros días te daba por tomar mucha agua… etc., depende de cómo estuviera. Han sido días muy largos.

¿Dónde encuentras tu refugio, Imanol?

En la soledad, me relaja y me alivia. Sobre todo a horas en las que la gente duerme. Me permite tener un tiempo largo para mi antes de empezar el día. Ya he renunciado a la vigilia.

Cuido mucho mi salud. Soy bastante tiquismiquis con la comida, no me gusta lo muy graso, ni lo muy fuerte, y me gusta mucho el producto fresco.

Tus hijos han seguido tus pasos, ¿cómo los ves?

Estoy ilusionado, es algo nuevo, los veo mucho y estamos muy en contacto, hemos dedicado mucho tiempo a estar juntos. Son muy diferentes y ojalá que tengan suerte, porque amor por el trabajo ya lo tienen, necesitan tener suerte y la vida que ellos quieran.

Entrevistamos a Imanol Arias© Félix Valiente
Imanol Arias junto a Ana Duato , Merche en ‘Cuéntame’, y Silvia Abascal y Carlos Hipólito, que se han incorporado esta temporada como los hijos del matrimonio Alcántara, María y Carlitos, en el tiempo presente

¿Te da miedo, en el sentido de lo duro de la profesión?

La profesión es insegura e irregular, que es algo que ya empiezan a tener muchos ciudadanos actualmente con sus profesiones. Hay momentos para todo. Hay temporadas en las que todo el mundo quiere tener tu teléfono y otras en las que también, pero lo usan menos. No me preocupa, quiero que vivan la vida que quieran, y eso ya es una responsabilidad tremendamente maravillosa. La vida es lo que sentimos, es el sentimiento y la emoción que tengas, el resto nos lo inventamos todo. Si hubiera que hacer un test PCR de cuál es el genoma de la vida, seguramente saldría la emoción. Es la inspiración mayor del amor.

¿Te ves en tus hijos?

No, asisto fascinado como padre de las diferentes etapas de sus vidas. Los hijos están por encima de muchas apreciaciones, los hijos siempre aportan algo maravilloso. En los hijos, el único reflejo es que ves tu futuro en su juventud.

¿Y a tus hijos en la ficción los quieres también en la realidad?

Los quiero mucho. Hemos desarrollado un cariño muy especial, con preocupaciones a parte de lo profesional, asistimos a trozos de vida de cada uno que nos hacen estar muy unidos.

¿Cómo ha sido la llegada en esta temporada de Carlos Hipólito y Silvia Abascal?

Bueno, Carlos no ha llegado, él siempre ha estado. Lo maravilloso de Carlos es que antes lo veíamos cruzando el plató para ir a poner unos offs, y al salir nos decía: “oye, qué bonito lo que he visto”. Cuando veías el capítulo lo clavaba, sin haber estado en el rodaje. Colocaba todo en su sitio, con su enorme capacidad de transmitir. Ahora, la única diferencia es que está con nosotros. Carlos físicamente en rodaje es una alegría. Es un actor muy, muy , muy, muy bueno y muy alegre. Disfruto muchísimo trabajando con él. Silvia es una actriz admirada, es una mujer a la que todo el equipo le tenemos un cariño y una admiración increíble. Está haciendo un trabajo precioso.

¿Y el regreso de Anna Allen?

Anna siempre ha sido mágica. Es una buenísima actriz. Siempre que aparece su personaje en acción (Marta Altamira), tiene la capacidad de hacer explotar algo, es como una revolución, del diesel al eléctrico. Con Marta Altamira se crea un nuevo futuro.

Si no hubiera existido nunca Antonio Alcántara…

No tengo una idea exacta. Puedo imaginarla. Habría hecho cine, más teatro…no hubiera sido tan placentero como lo ha sido con Antonio Alcántara.

Peluquería, maquillaje y estilismoEquipo de ‘Cuéntame como pasó”