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Desde que anunciaron el fin de sus veinte años de amor y casi quince de casados —el aniversario de su boda lo habrían celebrado el próximo 10 de junio—, Fabiola Martínez y Bertín Osborne han tenido que enfrentarse a todo tipo de rumores. No obstante, con la transparencia que siempre la ha caracterizado, la exmodelo venezolana no ha tenido problemas en dar un paso al frente y disipar todas las dudas con el fin de zanjar especulaciones que ella misma ha calificado de “injustas” y “que hacen mucho daño”. Lo ha hecho para que sus hijos, Kike —que cumplirá catorce años este domingo 31— y Carlos —que ya tiene doce—, recuperen la tranquilidad cuanto antes.
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En primer lugar, Fabiola ha expuesto las cuestiones económicas sobre el fin de su matrimonio. Por un lado, la exmodelo ha asegurado que el dinero nunca será un motivo de disputa con Bertín, a quien le sigue guardando muchísimo cariño y respeto: “No va a haber un conflicto económico en lo que respecta a nuestro divorcio porque eso ya estaba pactado desde hacía muchísimo tiempo, justo antes de casarnos”, ha revelado Fabiola desde la calma. “Cuando decidimos casarnos, una de las cosas que hablamos, de mutuo acuerdo, fue firmar la separación de bienes absoluta. Eso significa que ninguno de los dos tiene ninguna obligación con el otro”, ha explicado la venezolana, antes de insistir: “Lo que Bertín tenga o deje de tener es suyo y solamente suyo. Y lo que yo tenga o deje de tener es mío y solamente mío”.
“Probablemente, vengan tiempos muy complicados. Una separación nunca es fácil. Hay muchas cosas que colocar a nivel emocional”
La manutención de Kike y Carlos
Otro de los temas que ha abordado públicamente Fabiola es la pensión de sus dos hijos , aunque ella misma ha apuntado que es algo que todavía no ha terminado de cerrar con el cantante y presentador. “Obviamente, tenemos una obligación que tenemos que acordar cómo poderla aplicar”, ha manifestado la exmodelo. “Ambos, por ley, tenemos la obligación de asumir las responsabilidades de su manutención y esas son las únicas cosas, en lo que respecta a lo económico, de lo que Bertín y yo tenemos que hablar”, ha aclarado Fabiola, quien ya ha avanzado sus planes de abandonar el domicilio familiar actual, situado en la localidad madrileña de Pozuelo de Alarcón, en un futuro: “La casa en la que estamos viviendo ahora es alquilada y no es en propiedad nuestra. El dueño quiere venderla desde hace tiempo, pero ha tenido la consideración de esperar a que nosotros encontremos la casa apropiada. Todavía no tenemos nada claro al respecto”.
“Lo que Bertín tenga o deje de tener es suyo y solamente suyo. En lo que respecta a lo económico, lo único que tenemos que hablar es la manutención de los niños”
Sus proyectos profesionales
Al tiempo que busca un nuevo hogar para sus dos hijos, Fabiola sigue con sus compromisos profesionales como presidenta de la Fundación Bertín Osborne , que, como recordarán nuestros lectores, es un organismo que ofrece ayuda a familias de niños con discapacidad. Por otro lado, la venezolana tiene intención de continuar con sus proyectos publicitarios. Aun así, la exmodelo se ha animado a volver a estudiar, matriculándose en un máster en Administración de Empresas, Coaching de Inteligencia Emocional y Programación Neurolingüística, para poder llevar estos conocimientos a la práctica desde la citada fundación.
Como ha manifestado públicamente, Fabiola quiere ser económicamente independiente: “Seguiré trabajando, ganándome la vida, como lo he hecho siempre desde que tengo dieciséis años”, ha dicho la todavía mujer de Bertín, quien se presentó a Miss Venezuela en 1991 y, desde entonces, no ha parado de trabajar como modelo. Como curiosidad, ha aparecido en numerosos videoclips de artistas de primer nombre, como Julio Iglesias —en el de Agua dulce, agua salá— o Alejandro Sanz —en el de Y si fuera ella—. De hecho, cabe recordar que conoció a Bertín, en 2001, en el casting para uno de videoclips del cantante andaluz.
“Estoy con ilusión de empezar cosas nuevas y con tristeza por no haber mantenido ese matrimonio como en un principio esperábamos. No ha podido ser”
‘Serena’, pero ‘triste’
En sus últimas declaraciones, Fabiola se ha mostrado sin dobleces, hasta el punto abrirse completamente y sincerarse sobre su estado de ánimo. Por un lado, ha confesado sentirse “bien, tranquila, serena y con ilusión de empezar cosas nuevas”. Pero la venezolana también ha reconocido su “tristeza de no haber conseguido mantener ese matrimonio como en un principio esperábamos… No hay podido ser. Sin más”. Puesto que esta difícil decisión de separarse lleva tomada por el matrimonio desde hace ya dos meses, tal y como adelantábamos a nuestros lectores en nuestro anterior número, Fabiola ha compartido sus sentimientos con entereza: “La vida sigue, evoluciona… Crecemos, aprendemos… Y en ese momento es donde yo me siento ahora”, ha declarado, antes de apuntar: “Probablemente, vengan tiempos muy complicados. Una separación nunca es fácil. Hay muchas cosa que colocar a nivel emocional, a nivel de costumbres”. Por todo ello, la exmodelo ha pedido respeto para ella y Bertín: “El amor existe, pero no es perfecto y los dos nos merecemos estar bien y ser felices. Eso es lo que estamos intentando, sin hacer daño a nadie”.