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En julio de 2019, Pamela Anderson anunciaba su ruptura con el futbolista Adil Rami, quien fuera su novio durante los dos últimos años y reconocía encontrarse "devastada" tras descubrir que él, al que calificó de "monstruo", tenía "una doble vida" con otra mujer. Solamente seis meses después, la actriz sorprendía casándose en secreto con el magnate de Hollywood, Jon Peters, que confesaba llevar 35 años enamorado de ella. Era la quinta boda para ambos, pero su historia de amor duraba mucho menos de lo previsto. Tan solo doce días después de darse el 'sí quiero', la pareja decidía romper su relación cuando ni siquiera habían llegado a formalizar su matrimonio de manera legal. Ahora, la intérprete de Los vigilantes de la playa, vuelve darse el "sí quiero" para sorpresa de todos los fans. Fue el pasado 25 de diciembre, tal y como ha revelado The Daily Mail, cuando celebró su boda secreta, esta vez con su guardaespaldas Dan Hayhurst.
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Pamela Anderson se separa de Jon Peters doce días después de casarse
Anderson se casó con su guardaespaldas en una ceremonia íntima, sin la presencia de amigos o familiares, en los terrenos de su casa en la isla de Vancouver después de enamorarse durante el confinamiento provocado por el coronavirus. La boda se celebró en el patio trasero de la extensa propiedad rural que la actriz compró hace unos años sus abuelos en Ladysmith (Canadá) y ella lució un impresionante vestido de novia blanco vintage con mangas estructuradas, un largo velo y un pequeño ramo de rosas blancas y rosas. Por otro lado, Dan vistió pantalones negros y una camisa blanca. "Este año juntos se ha hecho como si lleváramos toda la vida. Estoy enamorada. Nos casamos en Nochebuena con la bendición de nuestras familias, todos los que conocemos están felices por nosotros", explicaba ella en el citado medio.
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Para sorpresa de todos, la vigilante de la playa más famosa de la serie de televisión escondía un secreto bajo su traje de novia: unas largas botas de agua que utilizó para pisar por el jardín. "Saqué la canadiense que hay en mí. Me casé en esta propiedad como hicieron padres, quienes todavía siguen juntos. Así que siento que he cerrado el círculo. Creo que este sitio tan romántico tiene mucha energía curativa, me siento en paz aquí", revelaba la actriz. En cuanto al pastel de boda, la pareja decidió algo sencillo: una tarta vegana casera de tan solo dos pisos. Debido a la situación mundial, Pamela y Dan han decido no irse de viaje de novios por ahora, aunque la actriz tiene muy claro lo que piensa sobre el tema. "Para mí todos los días son luna de miel", confesaba.
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