Hace una semana que Francisco Rivera y Lourdes Montes celebraban el segundo cumpleaños de su hijo Curro, que ya ha dejado de ser un bebé para convertirse en un niño que, como es lógico, no deja de crecer. Sin embargo, en las últimas imágenes que ha compartido su madre llama la atención lo grande que está para su edad. 'Creciendo por días', escribía la propia diseñadora sobre la fotografía en la que el pequeño, con vaqueros y camisa blanca, hace gala, además, de un estilazo.
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Lourdes Montes y Marta Ortega, unidos por el abrigo mágico que más estiliza
En una de las instantáneas que ha publicado su madre, podemos ver a Curro, muy alto y estilizado, dirigiéndose con decisión hacia un rincón de la casa, donde se puede vislumbrar un capote en el suelo junto con un estoque de juguete, lo que hace pensar que el pequeño tal vez haya heredado la pasión por la tauromaquia de su familia paterna, o simplemente le encanta imitar a papá. En otra de las fotos, Lourdes demuestra que, pese a lo mucho que ha crecido, el niño sigue siendo tan cariñoso como siempre y duerme la siesta tranquilo y feliz en brazos de mamá.
El cumpleaños de Curro ha sido la guinda perfecta a unas navidades muy diferentes, pero en las que también ha habido momentos para el recuerdo como el reencuentro navideño entre los hermanos Rivera con sus respectivas familias. Ya era toda una tradición que Francisco y Cayetano comiesen con Kiko el 25 de diciembre, pero este año cobraba un significado especial al afianzar el acercamiento entre los tres después de la creciente tensión entre el DJ y su madre, Isabel Pantoja. Además, a la cita acudían también sus esposas, Lourdes Montes, Eva González e Irene Rosales, con sus respectivos hijos. Poco después, se producía otro gran reencuentro al que también su unió Tana Rivera, la hija mayor de Francisco con Eugenia Martínez de Irujo.
A Lourdes le encantan la Navidad, tal y como ella misma contaba en un excepcional reportaje para la revista ¡HOLA! y, aunque este año haya habido limitaciones debido a la crisis sanitaria, siempre intenta transmitir a sus hijos el espíritu navideño para que lo vivan con la misma intensidad que siempre lo ha hecho ella. Ahora, es tiempo de propósitos y la diseñadora se ha propuesto tomarse el año con más calma para disfrutar de tiempo con la familia, a pesar de todos los proyectos profesionales que tiene por delante con su firma de moda Mi Abril.