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Cuando los primeros días del año las predicciones meteorológicas anunciaban la llegada de una importante borrasca llamada Filomena, no podíamos imaginar su magnitud y mucho menos sus devastadoras consecuencias. El temporal ha teñido de blanco gran parte de la geografía española, dejando estampas que parecen sacadas de un auténtico cuento, pero a la vez ha provocado un sinfín de problemas en la rutina de las ciudades, alterando por completo su funcionamiento. La nieve, que ahora ha pasado a convertirse en hielo, ha hecho que, por ejemplo, los Reyes tengan que modificar su agenda oficial. El lunes y el martes, los actos que tenía don Felipe -varias audiencias en el El Pardo y la clausura de la Conferencia de Embajadores- quedaron suspendidos. También doña Letizia tuvo que posponer su reunión con la Federación Española de Enfermedades Raras (Feder) y la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción aplazaba un acto que iba a presidir la mujer del monarca el jueves.
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Mientras que Filomena ha vaciado la agenda de doña Letizia durante toda la semana, el Rey se adaptaba a las circunstancias reapareciendo el miércoles en público. Eso sí, lo hacía de manera telemática para participar en la apertura de la XI edición del Spain Investors Day, una jornada que se tendría que haber hecho en el parque de El Retiro. En este foro económico mandó un mensaje de "cercanía y apoyo a todos los que han sufrido pérdidas y se han visto seriamente afectados por el temporal" y se mostró positivo al pensar en una pronta recuperación de la normalidad tras este desafío. El viernes estaba prevista su primera del Palacio de La Zarzuela para desplazarse hasta Toledo para inaugurar el nuevo centro logístico de Seur en Illescas, pero tampco pudo asistir por las inclemencias del tiempo
Cambios de última hora, presentadores ausentes y maratones televisivos
La gran nevada cambió por completo la parrilla televisiva durante el fin de semana ya que a muchos presentadores y trabajadores de la pequeña pantalla les resultó imposible acudir a los estudios. Sus viviendas, al igual que las de miles de españoles, quedaron aisladas y la programación tuvo que improvisarse. El viernes Pedro Piqueras no pudo abandonar Telecinco y se puso al frente también de los informativos de fin de semana. El sábado por la noche se sentaba junto a él Ángeles Blanco y a la mañana siguiente pudo sumarse Pepe Ribagorda.
En la misma cadena, María Patiño presentaba Socialité desde casa y Emma García hacía una maratón con su programa y ocupando el hueco de Sábado Deluxe. Junto a ella, solo dos colaboradores tanto por la tarde como en la noche: José Antonio Avilés y Juan Luis Galiacho. Por su parte, Jorge Javier Vázquez conseguía ir el domingo a las instalaciones de Mediaset y lo hacía con una maleta por si tenía que dormir en su camerino.
Las complicaciones se han extendido más allá del fin de semana. El lunes José Antonio Luque, de deportes, presentaba el inicio de Cuatro al día hasta que llegó Marta Reyero, cuya actitud ha sido muy aplaudida ya que no pasó por maquillaje y peluquería sino que dio la información tal y como venía de su casa, sin cambiarse ni retocarse tras su viaje en Metro. "Muchísimas gracias por haber ocupado el puesto ese rato y por haberme salvado este tramo. Estas dificultades nos afectan a todos, yo incluida, que vengo como vengo", le decía a su compañero. Mejor suerte corrieron en Antena 3, donde Matías Prats, Mónica Carrillo e Himar González conseguían llegar al plató a pesar de los contratiempos y los problemas en las carreteras, vías de tren...
En Telemadrid tuvieron una situación muy similar. Para garantizar una cobertura informativa de sol a sol, Antonio López estuvo seis días sin poder volver a su domicilio. Ainhoa González contaba que el viernes, cuando se dieron cuenta de la magnitud de la nevada y de que todo se estaba complicando, reservaron habitaciones en un hotel cercano a la cadena y recolectaron toda la comida posible para subsistir. Quien no tuvo tanta suerte fue Concha Galán. Al salir de Hoy por ti cogió un taxi en el que estuvo atrapada quince horas en medio de la carretera M40. "Armando fue mi guardián, nos ayudamos mutuamente los dos", ha contado deshaciéndose en halagos con el conductor con el que estuvo. Con su compañera Nieves Herrero estuvo en todo momento en contacto telefónico, aunque esta también tuvo su particular aventura. Durmió en un hotel el viernes, el sábado hizo un programa en directo durante once horas y el domingo otro de seis antes de volver a casa en metro y precisar ayuda médica por una inflamación causada después de tantas horas sentada en el estudio de radio.
También los negocios se han visto afectados por el temporal. Ágatha Ruiz de la Prada fue una de las personas que disfrutó de las estampas heladas e históricas de la capital, pero también se ha visto afectada por Filomena en lo relativo a la profesional. La diseñadora ha tenido que tener cerrada varios días su tienda de la céntrica calle Serrano. Además, la persona que es su mano derecha en los negocios se ha roto un brazo por una caída povocada por el temporal. También tuvo que cancelar las reservas que tenía para sus restaurantes David Muñoz. Al chef y a todo su equipo le resultó imposible abrir DiverXo y StreetXo "por estar literalmente enterrados bajo nieve".