Tic-tac, tic-tac... Estamos en la recta final del 2020, un año que Cristina Pedroche despedirá nuevamente desde la Puerta del Sol de Madrid, desde donde retransmitirá las campanadas -es su séptima vez consecutiva- al lado de Alberto Chicote. Pero antes de tomarse las doce uvas con los espectadores y descubrir el secreto mejor guardado -su esperado look para la noche del 31 de diciembre-, la presentadora ha cumplido con la tradición que sigue todos los diciembres: correr la San Silvestre Vallecana. Este año la popular carrera se celebra de manera diferente, pero la madrileña la ha vivido con la misma intensidad e ilusión. "Para mí es una tradición correr 10k antes de terminar el año. Hoy lo he hecho rodeada de naturaleza y amigos. No puedo estar más feliz", ha dicho junto a una imagen en la que aparece saltando sonriente tras tachar de las tareas pendientes esta cita.
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"Hace un día precioso, ya estamos en la Casa de Campo para correr la National-Nederlanden San Silvestre Vallecana. Diez kilómetros, ¡no hay excusas!", ha dicho Pedroche muy animada en un vídeo que ha grabado antes de comenzar el ejercicio. Una vez cumplido su reto, la presentadora ha vuelto a casa y ha aprovechado el sol que ha iluminado la capital durante la mañana de este domingo para nutrir su cuerpo de vitamina D. Aunque lo que sin duda le ha permitido reponer fuerzas ha sido el suculento menú del que ha disfrutado: paella con pollo y verduras con tarta de queso de postre. "Esto es lo que yo necesitaba para revivir. Mamma mía la tartita de Pedroche", ha dicho mientras degustaba el dulce del que ella misma compartía la receta hace un tiempo.
En estos once días que restan de año, la presentadora de Zapeando tendrá que ultimar los preparativos de la Nochevieja, una velada que está deseando que llegue aunque reconoce que está más nerviosa de lo habitual. Pedroche es consciente de que su estilismo de las campanadas -del que ha dado como pista que será luminoso y cómodo- es un tema muy popular, en esta ocasión ha reconocido que le resulta frívolo que su look se convierta en el centro de atención por el momento tan complicado que estamos viviendo debido a la pandemia mundial. Precisamente para llenar los hogares de entusiasmo y optimismo, tiene claro que ella tiene que pasárselo muy bien en la última retransmisión de 2020 para hacérselo pasar bien a la gente que le esté viendo por televisión, y eso que para ella esta tampoco es su mejor etapa.
Un año agridulce
Estos últimos meses no han sido fáciles para el matrimonio formado por Cristina y David Muñoz. En abril la presentadora despedía a su abuela Dominga, de la que lamentaba no poder despedirse debido a las restricciones. Poco antes su marido daba positivo en COVID, una dolencia de la que ha estado arrastrando secuelas durante mucho tiempo. Profesionalmente el chef ha vivido momentos agridulces. Por un lado ha revalidado sus tres Estrellas Michelin, pero por otro ha tenido que cerrar el local que tenía en Londres, StreetXO. En DiverXO sufrió tres cierres forzosos en los últimos seis meses. A finales de agosto se vieron obligados a clausurarlo temporalmente debido a un incendio en el local; poco después, volvían a cerrar sus puertas tras detectar algunos casos de coronavirus y, pese a que ya se habían cumplido la cuarentena requerida, finalmente tomaron la decisión de no reabrir debido a las restricciones impuestas por la Comunidad de Madrid.
Cristina Pedroche, nerviosísima ante las campanadas