Quedan muy pocos días para que en casa de Ana Boyer y Fernando Verdasco pasen a ser cuatro. El matrimonio, que esta misma semana celebraba su tercer aniversario de boda, ha puesto en marcha la cuenta atrás para dar la bienvenida a su segundo hijo, un niño al que todos esperan con enorme ilusión. Mientras llega el deseado momento de ver por primera vez la carita de su bebé, ella sigue adelante con su rutina deportiva, unos ejercicios que hace tanto si está en su domicilio como si se encuentra de viaje puesto que en esta disciplina ha encontrado una gran ayuda para mantenerse radiante a lo largo de la dulce espera. "Cada día intento sacar un hueco para cuidarme, ya sea haciendo algo de ejercicio, practicando yoga o, como mínimo, dedicándome unos minutos de relajación", ha explicado la hermana de Enrique Iglesias junto a una imagen en la que aparece con ropa cómoda sentada sobre una esterilla.
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-Ana Boyer y Tamara Falcó le cantan el 'Cumpleaños Feliz' a Fernando Verdasco
-La risa contagiosa de Fernando Verdasco y Ana Boyer con su hijo Miguel
La única hija de Isabel Preysler y Miguel Boyer afronta esta recta final con mucha calma aunque sin parar al tener a Miguel, que con un año y medio es todo un terremoto, un niño imparable, lleno de energía y travieso. Tal y como explicaba este verano a ¡HOLA!, en su primer embarazo estuvo tranquila y ahora, al saber cómo es todo el proceso, es consciente de "lo que me puedo esperar y voy más segura". Ana, que dará a luz de manera inminente, contará en todo momento con el apoyo de Fernando, quien la acompañará en el momento del parto al igual que hizo con su primogénito. Juntos atraviesan una etapa muy dulce en la que queda patente lo mucho que se quieren y la gran complicidad que existe entre ellos gracias a las fotos que comparten y a los mensajes de amor que intercambian. Ambos coinciden en que desde que se casaron en la isla de Mustique la felicidad es lo que ha primado en sus vidas y están dispuestos a seguir evolucionando juntos. De hecho, a punto de tener a su segundo hijo, no descartan seguir ampliando la familia más adelante.
Un cierre perfecto a un año complicado
El segundo hijo de Ana y Fernando, cuyo nombre aún no han compartido, pondrá el broche de oro a un año agridulce, especialmente para él. Cabe recordar que el tenista ha tenido que limitar su actividad profesional debido a la crisis sanitaria y no pudo jugar Roland Garros, uno de los torneos más importantes, a causa de una injusticia que tiene su origen en el positivo en COVID-19 que había dado tiempo atrás. Además ha acarreado una lesión por la que finalmente ha tenido que pasar por el quirófano. A comienzos de noviembre era operado de la rodilla en el centro Cedars-Sinai Kerlan-Jobe Institute de Los Ángeles para "volver a jugar sin dolor". Desde entonces se recupera favorablemente e incluso ha podido volver a entrenar. Además de este problema, el matrimonio también ha recibido a lo largo de este 2020 noticias tristes como el fallecimiento del marqués de Griñón, padre de Tamara Falcó, la hermana de ella.
Como contrapunto, la pareja también ha tenido grandes sorpresas en estos últimos meses. Con el inicio del confinamiento se instalaron en la casa de Isabel Preysler, así pudieron pasar en familia esas semanas en las que el pequeño Miguel se convirtió en la alegría de la familia gracias a sus primeros pasos, sus primeras palabras, sus juegos y su sonrisa constante. Además, justo en esa etapa se enteraron de que iban a ser padres nuevamente tal y como revelaron en exclusiva en ¡HOLA!. También están entusiasmados de haberse convertido en tíos ¡por partida triple! En enero nacía Mary, la hija de Enrique Iglesias y Anna Kournikova mientras que en julio era Sara Verdasco quien daba a luz a las mellizas Carmen y Valentina.
El hijo de Ana Boyer y Fernando Verdasco da un paso más para convertirse en toda una promesa del tenis