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Desde que el pasado mes de marzo saliese a la luz la relación entre Ana de Armas y Ben Affleck, que ¡HOLA! confirmó con las primeras fotografías de la pareja, el romance entre los actores, lejos de ser fugaz, parece consolidarse cada día más. Es frecuente verles paseando por las inmediaciones de la vivienda del protagonista de Argo en Los Ángeles, acompañados de sus perros e incluso de los hijos del actor con Jeniffer Garner, por lo que la joven, de 31 años, pasaba la mayor parte del tiempo en casa de su chico, especialmente durante los tiempos más duros de la pandemia. Ahora, la decisión que habrían tomado supondría una mayor comodidad para ambos, además de un paso decisivo en su relación.
- El ajetreado paseo canino de Ben Affleck, sus hijos y Ana de Armas
© GtresonlineSegún han contado fuentes del entorno de la pareja a la revista People, la actriz cubano-española ha puesto a la venta su casa de Venice California) y se ha mudado definitivamente a la de su novio . "Su relación sigue siendo muy fuerte", confirma al mismo medio un amigo de Affleck. Hace apenas unos días, la pareja, volvió a dejarse ver, mostrando una gran complicidad, por algunas calles residenciales de los Ángeles en uno de sus habituales paseos. Además, lo hacían acompañados Seraphina Rose Elisabeth y Samuel, los dos hijos pequeños del protagonista de Batman vs Superman, y nada más y nada menos que ¡cuatro perros! Ana se ha integrado perfectamente en la familia de Ben y no solo ha conocido a sus hijos, también a su madre, Christine Affleck, toda una prueba de fuego que parece haber superado con éxito.
© GtresonlineTal es la buena sintonía que presenta la pareja que han llegado a sonar hasta campanas de boda, después de observar un detalle en unas imágenes captadas durante su vuelta al trabajo. Los actores han tenido que rodar más escenas de Deep Water, la película en la que surgió su historia de amor hace ya casi un año. Allí han sido fotografiados, muy sonrientes y divertidos, mientras compartían besos, abrazos y muchas risas, pero no ha sido su actitud, tan cercana y cariñosa como siempre, lo que ha llamado la atención. Lo sorprendente de las imágenes es el fabuloso anillo de diamantes que Ana luce en el dedo anular de su mano izquierda. ¿Están preparando ya su boda o se trataba tan solo de exigencias del guión? Por el momento ninguno de los dos se ha pronunciado al respecto.
En cualquier caso, está claro que la pareja sigue dando pasos en su relación después de disfrutar de su primer verano juntos entre paseos por Los Ángeles y Malibú, donde disfrutaron de algunos días de relax en la playa, y de haber comenzado un otoño igual de unidos, que han culminado con un día de Acción de Gracias en familia. La química que existe entre Ana y Ben queda patente en todos y cada uno de los momentos en los que les hemos visto juntos. Ana había roto un año antes su relación con el artista cubano Alejandro Pineiro, mientras que el actor volvía a sonreir junto a Ana tras un complicado periodo en el que vivió una ruptura con Lindsay Shookus y el divorcio de Jennifer Garner.
