La subasta de una escopeta de alta gama diseñada por el prestigioso fabricante de armas británico Purdey y que data de finales del siglo XIX, nos ha descubierto la curiosa y olvidada historia de su propietaria original, Lady Valerie Meux, una joven actriz norteamericana que ejercía la prostitución y tocaba el banjo en un antro de Londres y cuya vida cambió de la noche a la mañana tras conocer al prestigioso y millonario cervecero Sir Henry Bruce Meux, quien acabó sacándola de aquella vida para convertirla en toda una aristócrata.
A mediados de 1850, el por aquel entonces heredero cervecero, que provenía de una de las dinastías cerveceras más ricas de Gran Bretaña, Meux's Brewery, entró en un teatro y allí sobre el escenario pudo ver a Valerie Langdon de la que quedó totalmente prendado. Hay quien dicen que ambos se conocieron anteriormente en el casino de Venise, el mencionado anteriormente como antro, pero lo cierto es que sea como fuere, y a pesar del abismo social y económico que existía entre ellos, ambos se enamoraron y en cuestión de meses se casaron en secreto, revolucionando así las altas esferas de la aristocracia inglesa.
Valerie se convirtió en Lady Meux, para horror de la familia de su marido, quien nunca llegó a aceptarla y de repente, pasó a ser una de las mujeres más ricas de la Inglaterra del siglo XIX. Sin embargo, y a pesar de no ser bien vista, Valerie no dio de lado a su extravagancia y se transformó en una de las mujeres más excéntricas y progresistas de su tiempo, utilizando la fortuna de su marido con agudeza, estilo y excentricidad.
Tanto fue así que cuando se mudó a la residencia de su marido, conocida como Theobald's Park, con una extensión de cerca de 25 hectáreas, decidió hacer algunas reformas transformando el regio lugar en un un impresionante patio de recreo para la aristocracia londinense. Así, mandó instalar una pista de patinaje cubierta, una piscina, un museo de antigüedades egipcias y una sala de armas, donde con toda seguridad guardaba la escopeta que ahora va a ser subastada. Sin embargo lo más excéntrico de todo, fue que hizo comprar a su marido el Temple Bar una de las antiguas puertas de entrada a la ciudad de Londres y que fue trasladada piedra por piedra hasta la propiedad donde fue colocada de nuevo y ha estado olvidada hasta el año 2003 que fue restaurada y trasladada a su actual ubicación, en Paternoster Square, al lado de la Catedral de San Pablo.
Loca por ver y hacerse ver, Lady Meux se paseaba por el centro de Londres con un llamativo carruaje tirado por cebras en vez de caballos, y con el que lograba que todo el mundo la mirara. Practicaba deportes campestres, como la pesca y la caza de de urogallos en Escocia.
En 1881, fue pintada tres veces por el gran artista estadounidense James Abbott McNeill Whistler. Su primer retrato titulado como “Harmony In Pink And Grey” muestra a Lady Meux en su máximo esplendor con un fabuloso vestido de rosa brillante y blanco coronado por un sombrero de mamut. La imagen ahora está en la Colección Frick, una elegante mansión convertida en museo en el Central Park de Nueva York. El segundo retrato de Whistler, “Arrangement In Black” la muestra vestida para una gran noche en la ciudad, con un vestido escotado, acompañado de guantes negros, una tiara de diamantes, collar, brazalete y una estola de visón. Este retrato se encuentra en el Museo de Arte de Honolulu en Hawaii. El tercer retrato no corrió la misma suerte que el primero y el segundo, y Valerie harta de posar puso al límite la paciencia del pintor que acabó por destruir su pintura.
La pareja nunca tuvo descendencia lo que dejó a Lady Meux mucho tiempo libre para sus aficciones.Así era propietaria de varios caballos de carreras, con los que corrió bajo el seudónimo de Mr Theobalds, ganando el Sussex Stakes en 1897 y llegó a recopilar hasta 1.700 piezas egipcias para su particular museo.
Quedó viuda en 1900 y durante los siguientes diez años de su vida siguió gastado su gran fortuna para divertirse y ayudar a los demás, especialmente cuando se desató la segunda guerra bóer, un conflicto entre el Reino Unido y los fundadores de las repúblicas independientes del Estado Libre de Orange y la República Sudafricana. Fue debido a sus donaciones ( financió seis cañones navales) cuando conoció a Sir Hedworth Lambton, el comandante de la Brigada Naval inglesa, del que se enamoró perdidamente y a quien convirtió en el principal beneficiario de su testamento con la condición de que cambiara su apellido a Meux. Cuando ella murió en 1910, Sir Hedworth se convirtió en heredero de una fortuna de 200.000 libras esterlinas (223.000 euros), una gran suma por aquel entonces, así como de la propiedad de Hertfordshire y una nada despreciable participación en la la fábrica de cerveza Meux.
El arma, que saldrá a subasta el 7 de diciembre junto con una reproducción impresa del retrato de Lady Meux de Whistler, ha sido valorada en entre 3.000 y 5.000 euros y aunque se espera que alcance un valor más alto, lo que realmente no tiene precio es la historia de su propietaria “Era una inconformista de su tiempo y su historia, aunque no es muy conocida, es fascinante”, dice Simon Reinhold director de operaciones de la casa de subastas Holts Auctioneers. Además señaló que la escopeta está en perfectas condiciones y que puede ser usada hoy en día.