La cuarta gala de Mask Singer: adivina quién canta tenía guardada muchas sorpresas para los espectadores. Tras la máscara invitada de la semana pasada, en la que se escondía la presentadora y periodista Mónica Carrillo, este miércoles 25 de noviembre también aparecía Robot, un traje que desvelaba su identidad tras su actuación. Malú adivinaba quién era porque hace los mismos movimientos en redes sociales cuando baila. Cristina Pedroche se quitaba la cabeza de metal para revelar que participando había cumplido su sueño de "cantar bien y no pasar vergüenza". Caniche, Camaleón, Gamba, Cerdita y Cuervo se jugaban su continuidad, pero finalmente el crustáceo era el eliminado de la noche por ser el menos votado del público y los investigadores. "Si no es Máximo Huerta, me rapo la cabeza", prometía Javier Ambrossi. "¿Y entonces quién sería Javier Calvo ahora de los dos?", bromeaba Arturo Valls. Máximo Huerta era quien se escondía bajo Gamba, cumpliendo la intuición del investigador.
Javier Ambrossi reconoce que se emocionó al ver a Norma Duval en 'Mask Singer'
"No me reconozco. Ahora quiero ir por la calle con la máscara todo el rato", reconocía Máximo en su entrevista posterior al programa. "Desde pequeño me he disfrazado de todo, hasta de fallera, pero es que en el pueblo de pequeño me fascinaba. Para mí, Mask Singer ha sido como volver a la infancia. Hay que tener sentido del humor, la vida cambia y hay que divertirse. Me ha encantado participar. Hay que estar borracho de alegría siempre y divertirse. Creo que no es la primera vez que cantaba en público. Una vez creo que desafiné mucho con Mediterráno de Serrat", explicaba el periodista y exministro de Cultura. "Me hubiera gustado seguir cantando porque me lo he pasado muy bien. En el primer programa me hice una herida en la rodilla que no paraba de sangrar, pero como el traje era rojo ni me di cuenta", confesaba el periodista.
Mask Singer: todas las claves para conocer quién está bajo el disfraz de Cerdita o Cuervo
"Me entregué desde la primera actuación, aunque me faltaba al aire alguna vez y se sudaba mucho. Yo no soy tan pizpireta, pero era una manera de actuar, jugar y despistar porque había que entregarse. Pensé que si el traje se rompía, pues bueno... ya veríamos qué pasaba, pero me tenía que mover mucho. Creo que vieron que pensaban que era alguien que disfrutaba mucho de la vida, así que tenía que hacer algo que despistara", explicaba. "No lo ha sabido nadie, les decía que iba a hacer entrevistas. Cuando iba al parking hasta llegué a pensar que me podían raptar porque era bajar a un sótano, con indicadiones, llaves... No hablas con nadie, quitas los datos del móvil, no sabes dónde está el plató. Es impresionante", señalaba el presentador.
"Es normal que los Javis supieran algo porque hemos salido juntos alguna vez, así que la actitud... es normal que le sonara", aclaraba. Además, Máximo reconocía que dio el paso de presentarse por quitarse la imagen de serio y porque quería divertirse mucho. "Ese secretismo me gustaba mucho y además vi que Ryan Reynolds se había presentado y dije, ¿por qué no iba a estar yo ahí?", confesaba Huerta muy contento con su participación.