Dice Rozalén que cuando se tambalea muestra sus "fragilidades". "Me sienta de lujo el desahogo", asegura, sin embargo, en esta ocasión, ha querido compartir la otra cara de la moneda, "un detalle" que le ha alegrado el día. "Hemos ido a tomar un café calentito y un dulce a una cafetería de San Lorenzo de El Escorial, donde me encanta ir a pasear. Al ir a pagar me han dicho que nos había invitado una chica que estaba en la barra. Me he acercado sorprendida para preguntarle y agradecerle", cuenta la cantante, que acaba de publicar un nuevo disco, El árbol y el bosque. El encuentro con su seguidora fue de lo más reconfortante por el mensaje tan bonito que le trasladó. "Os he visto y me habéis alegrado. No quería molestar. Es mi manera de decirte que no dejéis de alegrarnos", una respuesta que emocionó a la artista. "Tenía unos ojos negros preciosos y una mascarilla de colores. No he podido darle un abrazo. Las dos nos hemos puesto a llorar", añade la de Letur, Albacete.
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Rozalén reconoce que es muy sensible a las críticas. "Todo me afecta de sobremanera y hay días que tengo miedo de que no compense", explicó en una carta compartida en su perfil de redes sociales. Pero gestos tan bonitos como el de esta chica de San Lorenzo de El Escorial hacen que vuelva a confiar en ella y vea la vida de otra manera. "Gracias por este detallazo tan hermoso. Quería decírtelo públicamente a través de este post. Gracias a todos los que me dais tantísimas muestras de amor... Con esto me debo quedar", reflexiona.
A sus 34 años, Rozalén, cuyo verdadero nombre es María de los Ángeles Rozalén Ortuño, se siente "muy cuidada" por mucha gente. "Es verdad que he tenido que demostrar mucho, pero soy muy afortunada", dijo en El cielo puede esperar, de #0 de Movistar+. Fueron muchos los que acudieron al funeral ficticio de la cantante, entre ellos, su madre, Angelita, y su padrino de bautismo, José Bono. "A María la conocí en un convento... donde la bautizamos y la cogí en brazos y resulta que 33 años después los dos tenemos más pelo", bromeó el que fuera ministro de Zapatero sobre sus comentados injertos capilares.
Al programa también acudió su novio, el periodista Daniel Ayllón, con quien vive en una casa de campo en Ayllón, Madrid. "Es maravilloso, un ser de luz, que me complementa", reveló hace dos años en una entrevista concedida a LOC. "Hacemos lo que podemos, porque tanto con su trabajo como con el mío es complicado coincidir, pero nos queremos y es lo único importante", añadió.