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Cada fin de semana Emma García se pone delante de las cámaras para ejercer como maestra de ceremonias en Viva la vida, y aunque afronta cada jornada laboral con la misma ilusión que si fuese la primera vez, este sábado pisaba el plató especialmente feliz y sonriente. ¿El motivo? El equipo con el que trabaja la sorprendió al llegar a los estudios de Mediaset y le hicieron un regalo que consiguió emocionarla, tal y como ella misma ha contado. La presentadora ha compartido una foto con un enorme ramo de flores que ayer la estaba esperando en su camerino para celebrar una significativa fecha. "¡Muchísimas gracias! ¡Qué sorpresa me he llevado al entrar en camerino! Ni me acordaba que hoy cumplo dos años con Cuarzo -refiriéndose a la productora- al frente de Viva la vida. No soy buena con las fechas, ni falta que hace, porque guardo con mucho cariño todos los buenos momentos vividos a vuestro lado. ¡Y los que nos quedan! Gracias", ha escrito sin poder ocultar su alegría por este bonito detalle.
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-Emma García recarga pilas en la nieve con la mejor compañía
En este proyecto televisivo del que forma parte desde hace dos años, Emma ha creado una gran familia al lado de los colaboradores y del resto de trabajadores que se mantienen detrás de los focos. Con algunos de ellos, como Kiko Matamoros, Marisa Martín Blázquez o Diego Arrabal -el paparazzi se despedía de la audiencia hace solo unas semanas para poder estar más tiempo con su familia- ya había coincidido anteriormente durante su paso por A tu lado, un magacín de características similares con el que cosechó grandes éxitos entre 2002 y 2007. Después de aquella primera toma de contacto con Mediaset, ha seguido vinculada a la cadena con espacios como ¡Clever!, El juego de tu vida, El debate de Supervivientes o Mujeres y Hombres y Viceversa. En este dating show estuvo una década, hasta que en 2018 le cedió el testigo a Toñi Moreno, quien a su vez le dio el relevo de Viva la vida. Curiosamente, este verano la andaluza ha vuelto a ponerse al frente del que fue su programa durante las vacaciones de su amiga.
© emmagarciawebUna vida plena en todos los aspectos
La periodista vasca de 47 años se ha convertido en uno de los rostros más queridos de la pequeña pantalla. Además, el éxito no solo le sonríe a nivel profesional, sino que Emma goza de una vida personal plena en la que siempre ha apostado por la discreción. Está casada desde hace veinte años con Aitor Senar, con el que ha vivido un amor de película ya que se conocieron con tan solo 16 años y sintieron un flechazo. Con el paso del tiempo ese amor adolescente fue creciendo y han formado una bonita familia al lado de su hija Uxue, de catorce años, a la que define como una niña fantástica y muy madura. Es precisamente el apoyo de los suyos lo que le da a la presentadora energía y fuerza. Y es que, según sus palabras, cuando llega a casa y su marido la abraza se siente la persona más protegida y especial del mundo.
A pesar de la solidez de su matrimonio, en alguna ocasión sí ha contado que al principio tuvieron que hacer frente a una dura prueba: la distancia.Un obstáculo que superaron con creces. Después de casarse, ella se trasladó a Madrid para cumplir con sus compromisos -recibió la llamada de Mediaset tras un tiempo trabajado en autonómicas de País Vasco y Navarra- y él siguió en San Sebastián. "Nos queríamos mucho, pero no coincidíamos, hasta que se vino a Madrid, y entonces descubrí que estaba mucho mejor con él que sin él. Hay que luchar por las relaciones", contaba.
De 'reportera de guerra' a presentadora estrella, el lado más desconocido de Emma García
