Kiko Rivera ha destapado la caja de los truenos. Hasta ahora nadie se podía figurar que la relación entre Isabel Pantoja y su pequeño del alma no era tan idílica como parecía. Después de años defendiendo a Isabel Pantoja, incluso llegándose a enemistar con su propia hermana Isa Pantoja o los otros hijos de Paquirri, Francisco y Cayetano Rivera, el DJ ha desatado una oleada de acusaciones hacia su madre que no parece tener retorno. El conflicto, que comenzó con un intercambio de reproches en televisión, ha derivado en un enfrentamiento familiar de lo más tenso tras salir publicada una entrevista en la que confiesa haberse sentido engañado por su madre en relación a la herencia de su padre.
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Los hermanos Rivera, unidos por primera vez frente a Isabel Pantoja
"Señores, yo no soy el malo de esta película lamentable. Solo soy alguien a quien la persona que más idolatraba me ha fallado de una manera irreparable engañándome toda la vida. Aún así, yo no hice esto público ya que yo no fui a hablar de ella sino de mis intimidades de las cuales soy dueño. Esa llamada no vino a cuento y las llamadas a terceros ya ni te cuento. Sólo es para que lo sepáis porque a muchos de vosotros lo que vais a leer os va a impactar”, señalaba antes de salir a la luz sus contundentes y duras declaraciones.
Mientras Kiko Rivera confiesa sentirse traicionado, Isabel Pantoja continúa recluida en Cantora guardando silencio. Un silencio que demuestra el dolor que podría estar sintiendo la cantante tras la inesperada y sorprendente reacción de su hijo, por el que siempre se ha desvivido y siente adoración.
Su hijo vino al mundo el 9 de febrero de 1984, apenas siete meses antes de la muerte de su marido, Francisco Rivera 'Paquirri'. A él le dedicó en 1985 su célebre melodía Mi pequeño del alma, cuya letra dice así. "Mi pequeño del alma. Con tu piel de canela. Tendrás la luna. Me iré cualquier noche a por ella. Serás para siempre la causa de todos mis celos. Serás para siempre el motivo que me hace vivir". A Isabel Pantoja la muerte del gran amor de su vida la sumió en una profunda tristeza y se volcó en su hijo que la ayudó a recuperarse del dolor por la pérdida de su esposo.
Con su niño del alma regresó a los escenarios. Todos recordarán la imagen del pequeño Kiko Rivera en brazos de su mamá cantando a dúo una canción que encandiló a los fans de Isabel Pantoja en su vuelta a los escenarios tras la muerte de su marido. Luego vinieron días muy felices como la comunión de Kiko, la llegada de su niña, Isa Pantoja, que fue un motivo de gran alegría para toda la familia, o la felicidad de convertirse en abuela. Años después del nacimiento de sus nietos y con motivo del bautizo de su nieta Carlota, la segunda hija de Kiko Rivera e Irene Rosales, Isabel Pantoja hacía estas declaraciones en la revista ¡HOLA! en las que volvía a dejar claro el profundo amor que sentían el uno por el otro: "A mi hijo lo amo con toda mi alma entera y doy mi vida por él. Me siento muy orgullosa de él y, además, sé cómo me quiere. Lo que siente mi hijo por mí es algo… inexplicable".
A su lado estuvo Kiko en algunos de los momentos más complicados de su vida, como su ingreso en prisión por el caso Malaya. Dos años después éste le recordaba a su madre que pasase lo que pasase él siempre sería su pequeño del alma. "Felicidades mamá. Sigo siendo tu pequeño del alma por muchos años que pasen. Siempre a tu vera, siempre a la verita tuya. Te amo por encima del mundo", comentaba emocionado junto a un collage de fotos de algunos de los momentos más felices de su vida. Nada entonces hacía presagiar este desencuentro, convertido ya en una guerra abierta entre madre e hijo. La relación con su hija Isa Pantoja nunca ha sido tan idílica como la de su hijo Kiko. Con ella ha vivido numerosos desencuentros. Unos desencuentros en los que el marido de Irene Rosales siempre se ha posicionado del lado de su madre, por ello es difícil comprender como su niño, al que más unida estaba, haya sido el que ha provocado este tremendo enfrentamiento familiar. Al contrario de lo que siempre ha sucedido, ahora es Isa Pantoja la que ha querido calmar las aguas y le ha pedido a Kiko que solucionen entre ellos el conflicto porque asegura que su madre está destrozada.
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