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Han pasado poco más de siete meses del fallecimiento del marqués de Griñón, y aunque sus seres queridos le siguen teniendo presente cada día, este 1 de noviembre es especialmente significativo y por eso su viuda ha querido recordarle de una cariñosa manera. Esther Doña ha compartido una foto de los dos muy sonrientes en un jardín que bien podría ser el del palacio de El Rincón, la casa en la que tantos buenos momentos pasaron juntos ya que allí se casaron y vivieron. Junto a esta romántica instantánea, la colaboradora televisiva de La Mañana, en TVE, ha escrito una cariñosa frase. "Mi amor, cada minuto te sigo sintiendo aquí conmigo, pero hoy es un día en el que tu presencia falta aún más. Esta noche volveré a buscarte en cada estrella", ha dicho melancólica la Marquesa viuda de Castel-Moncayo y Griñón.
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A comienzos de verano, tal y como avanzaba nuestra revista en exclusiva, Esther Doña se instalaba en el piso que tiene en la localidad madrileña de Majadahonda, donde comenzaba a escribir un nuevo capítulo en el que sus familiares y amigos más cercanos se han convertido en su gran apoyo para superar el duelo que supone la pérdida de su amor en unas circunstancias tan complicadas -falleció el 20 de marzo, en plena pandemia mundial y con numerosas restricciones activas-. Además, no se separa de su perrita Chloé, un bichón maltés que el aristócrata le regaló hace dos años para navidades y al que ha abierto incluso una cuenta en redes sociales. Precisamente con su mascota, a la que llama Chloé Falco Doña, rendía homenaje a su marido hace unas horas, cuando publicaba una foto de las dos cenando en casa con un vino del marqués de Griñón, quien producía también aceites.
Dos años y medio después de vivir el día más feliz de su vida -que se celebró en 2017, algo más de un año después de su presentación oficial como pareja- la malagueña atraviesa un momento complicado del que poco a poco se va recuperando gracias a su fortaleza, al cariño que recibe y a la ilusión que siente con su nuevo trabajo. Ella misma confesaba a ¡HOLA! en un excepcional reportaje, que no se imaginaba la pérdida de su marido a causa de una neumonía derivada del coronavirus ya que, aunque estaba en el hospital, horas antes de su fallecimiento estuvieron hablando por vídeollamada y lo encontró con su característico ánimo. "He vivido la peor época de mi vida. Perder a tu marido es una de las peores cosas que te pueden pasar… Pero perderlo de esta manera, sin poderte despedir, sin poder cogerle de la mano… Es terrible, es una gran pesadilla. Sientes mucha impotencia, piensas en él, que está solo, sin nadie a su lado…”, nos contaba Esther, que también tuvo COVID-19.
Un año muy complicado para los Falcó
La familia Falcó vive su año más difícil. En septiembre fallecía de manera repentina Jaime Carvajal Hoyos, marido de Xandra Falcó y, por tanto, yerno del marqués de Griñón. Al conocer esta inesperada pérdida, Esther se puso en contacto con la marquesa de Mirabel para transmitirle sus condolencias pero, aunque se deshace en halagos con el financiero, decidió no ir a darle el último adiós para evitar acaparar el foco mediático. En octubre recibían un nuevo golpe con la muerte de Fernando Falcó, hermano menor de Carlos. Aunque en esta ocasión Doña tampoco acudió al tanatorio de La Paz para dar un abrazo a sus allegados, sí dedicó unas palabras de cariño hacia su cuñado. "Qué caprichoso es el destino... en solo siete meses os vuelve a reunir", decía con tristeza junto a una foto de los dos aristócratas, que siempre estuvieron muy unidos.
Esther Doña empieza su nueva vida, en ¡HOLA!
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