Tras la muerte del torero Francisco Rivera en 1984, Cantora pasó a pertenecer a Isabel Pantoja y su hijo Kiko Rivera. La finca está situada entre Medina Sodonia y Vejer y es un homenaje al mundo taurino. Tiene bodegas, huerta, piscina, pozos, cuadras de caballos e incluso una pequeña plaza de toros. Durante estos años, ha sido en muchas ocasiones el refugio de la cantante. Pero ahora, su hijo ha reconocido en una llamada a Sálvame que le ha planteado venderla. "Para solucionar sus problemas y los míos, que son más pequeños, si hacía falta vender Cantora por mi parte no habría ningún problema", explicaba el DJ. Dale al play y no te lo pierdas el reportaje que la revista ¡HOLA! le hizo a Isabel Pantoja y Kiko Rivera en Cantora.