La conocida como 'novia de España' celebra este viernes 16 de octubre sus nueve décadas de vida. Aunque probablemente no lo haga como a ella le hubiera gustado. Desde hace ya once años, Carmen Sevilla sufre Alzheimer y esta enfermedad degenerativa va mermando poco a poco sus capacidades cognitivas y, sobre todo, la consciencia de su condición de leyenda, de mito del cine y de la copla. Probablemente no se acuerde, pero su rostro fascinó a históricas figuras como Frank Sinatra, Cantinflas o Charlton Heston.
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El día que Carmen Sevilla abrió las puertas de su casa
Hoy en día nada de eso tiene importancia para ella. Lleva un lustro en una residencia especializada en el cuidado específico de personas mayores con Alzheimer de Aravaca (Madrid), donde recibe a menudo el cariño y el apoyo de su hijo Augusto Algueró -fruto de su matrimonio con el compositor Augusto Algueró-. Este viernes no será distinto y a buen seguro que tanto él, que continúa siempre muy pendiente de su madre, como el gran amigo de la actriz, Moncho Ferrer, la acompañan en esta nueva vuelta al sol de Carmen Sevilla.
Hace 50 años, Carmen Sevilla presentaba a su hijo en ¡HOLA!
Eso, si la crisis sanitaria del coronavirus lo permite. Cabe recordar que en los últimos meses las residencias de personas mayores se han visto gravemente afectadas por la pandemia de COVID-19. Pero la intérprete está muy bien cuidada y estable en este centro de la zona oeste de Madrid. Aunque no sea consciente de ello y viva totalmente apartada de los flashes, los focos y la atención mediática, todos aquellos que la conocieron y que compartieron momentos inolvidables con ella a menudo la recuerdan y le envían todo su cariño.
María del Carmen García Galisteo -ese es su verdadero nombre- comenzó como bailarina en diversas obras de teatro. De ahí, y de manera progresiva, se animó a entrar en el mundo de la música y del cine. De hecho, la mayoría de películas que llegó a protagonizar contaban también con sus interpretaciones vocales. Posteriormente, el popular Telecupón la lanzó a los más alto... y al corazón de gran parte de los españoles, que se enternecieron con sus gestos, espontaneidad, despistes y divertidas ocurrencias. En los últimos años de su trayectoria profesional, pasó también por el programa Cine de Barrio, donde sustituyó a José Manuel Parada.