Lester ha vivido la que es, hasta la fecha, su hoguera más dura en La isla de las tentaciones. "Me he dado cuenta de que no era feliz", le ha escuchado decir a Marta, una conclusión a la que también él había llegado anteriormente. "Pienso igual que ella (…) Me siento mal. Aquí estamos viendo la realidad de nuestra relación. Ni yo la estaba haciendo feliz ni ella a mí", afirmaba el concursante al ver las imágenes. Sin embargo, poco después se venía abajo al descubrir que su novia había besado a Dani y habían pasado la noche juntos entre caricias: "No me lo esperaba para nada. Me siento como una mierda. Estoy viendo a mi novia de once años besarse con otro chico. Estoy mal, me duele, la quiero. Me acaba de reventar". La decepción le ha invadido y no sabe si se trata de una venganza por su acercamiento con Patricia.
© Mediaset"Y yo me sentía culpable por dormir con Patri. Si hubiera querido también podría haber hecho todo eso. No lo hice por respeto, porque la quiero y no sé si eso es una venganza o de verdad le quiere y está viendo en él lo que no ve en mí. Si es así, next. Eso sí es infidelidad, no lo que he hecho yo", aseguraba afectado el concursante. Ya en Villa Montaña, recibió el apoyo de todos sus compañeros. Especialmente, el de la chica con la que tanto ha conectado dentro de la casa.
© Mediaset"Con Patri me sentí entendido, es una niña que no le cabe el corazón en el pecho. Fue mi mayor apoyo, le debo mucho. Sus lágrimas me dieron como la sensación de que estaba sufriendo por mí y eso es lo que me llenó de ella, realmente", se sinceraba Lester después del disgusto. Y, tras el consuelo, llegó el primer beso. El concursante ha reaccionado a la actitud de su novia en Villa Playa y se ha dejado llevar por sus deseos. "No quiero que pienses que esto es una venganza, te juro que me encantas", le ha asegurado a la soltera.
© MediasetMientras, en Villa Montaña, la pasión entre Marta y Dani continúa desatándose. Después de que se besaran en la piscina y ella fuera consciente de que aquello echaba por tierra una fidelidad de más de diez años, la conexión entre ellos ha subido de temperatura. Después de una fiesta, él se ha colado en su habitación y han dado rienda suelta a la atracción que sienten el uno por el otro. "Ha ido más allá de lo que quizás me hubiera gustado que fuera. Demasiado. Bastante", se sinceraba Marta tras el encuentro.
