Pilar Rubio ha concluído un verano que siempre recordará por ser en el que dio la bienvenida a su cuarto hijo Máximo Adriano, y acaba de estrenar un otoño en plena forma y con las pilas cargadas para ponerse de nuevo al frente de loscomplicados retos de El Hormiguero. El secreto para estar siempre llena de energía no es tal, ya que la presentadora siempre ha sido muy transparentes sobre las rutinas que le hacen tener una espectacular figura tan solo dos meses y medio después de dar a luz, así como una alimentación sana que también suele compartir con sus seguidores. En la víspera de su santo, ha mostrado cómo comienza su día y, además, ha adelantado lo que planea para el 12 de octubre.
"Empezando el día antes de mi santo con energía. Lo celebraré con mis hombrecitos", cuenta Pilar junto a una fotografía en la que aparece con ropa deportiva y en la que vuelven a quedar patentes los excelentes resultados de su entrenamiento. Sin embargo, la anécdota de esta publicación la ha protagonizado una confusión de la madrileña, que en un primer momento escribió que empezaba el día de su santo, sin darse cuenta de que aún era la víspera. Sus seguidores enseguida le han recordado que la celebración es mañana, 12 de octubre, coincidiendo con el Día de la Hispanidad. Y ella se lo ha tomado con mucho humor corrigiendo el texto.
'Estudiando con mamá', Pilar se prepara para el trabajo con la ayuda de Máximo Adriano
En cualquier caso, ha dejado claro que ese día lo celebrará rodeada de su marido, Sergio Ramos, y sus cuatro hijos, Sergio Jr, Marco, Alejandro y Máximo Adriano, con los que disfruta de los mejores momentos. Hay noches que pienso: ‘Madre mía, ¡cuatro hijos! ¿Por qué no lo he pensado antes?’. Pero soy tan feliz que eso me llena y me da energía”, decía en una entrevista en exclusiva para ¡HOLA! A pesar de lo encantada que está con su familia numerosa, Pilar asegura que no se plantea continuar ampliándola: “Definitivamente, cerramos el cupo de hijos. Creo que ya hemos hecho lo que podíamos por la natalidad”.
De momento, la familia se encuentra volcada en el nuevo miembro. El pequeño Máximo Adriano es el rey de la casa, con permiso de sus hermanos, que ya se preparan para hacer un hueco en sus juegos al benjamin que, por ahora, bastante tiene con dormirse durante un relajante baño o con mamá o encandilar a todos con sus adorables ojos azules, que ha heredado de su madre. Y no es el único que ha heredado uno de los rasgos más característicos de la madrileña. Marco y Alejandro también tienen los ojos claros como Pilar. "A Marco lo ves rubito y con los ojos azules y parece un ángel pero es un trasto", decía sobre su segundo hijo, que ya tiene cuatro años. De Alejandro, el tercero, aseguraba que era "una mezcla de sus dos hermanos mayores".