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Juan del Val es uno de los rostros más populares de la televisión gracias a su participación en El Hormiguero. Con su simpatía, talento y don de gentes, el guionista y productor se ha sabido ganar al público que se divierte con cada una de sus ocurrencias. El periodista lleva 20 años felizmente casado con Nuria Roca, con quién tiene tres hijos, pero si de alguien presume y está verdaderamente orgulloso es de su madre. Ángeles Pérez, de 79 años, se dedica a reinsertar presos y su extraordinaria historia ha sido contada en el programa Quijotes del S. XXI, el nuevo espacio de Sonsoles Ónega.
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Ángeles lleva casi cuarenta años reinsertando presos. "Mi madre es la persona con más fuerza que jamas he visto en mi vida", asegura Juan del Val. Ella es presidenta de la Asociación Pro Recuperación de Marginados (Apromar) y ayuda a los reos que están de permiso penitenciario. Ella es la esperanza de los reclusos, como así la definen quienes han tenido el privilegio de conocerla. La madre del escritor ha contado su experiencia y cómo comenzó a desempeñar este trabajo con tan solo una habitación en la que acogía reclusos que no tenían dónde ir cuando salían de la cárcel. "Yo llevo 39 años siendo voluntaria en la cárcel. He visto muchas cárceles, pero me preocupa más cuando la gente sale a la calle y no tiene nada...Todas las personas necesitan que se les dé otra oportunidad", asegura.
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El programa no solo recogió su testimonio, sino también el de algunos presos ya rehabilitados gracias a la ayuda de Ángeles. "Ella me salvo la vida", dice Eva, que estuvo presa en Soto del Real durante año y medio y tuvo tantos problemas en la cárcel que estuvo a punto de tirar la toalla. "Viví en los pisos de Ángeles casi cuatro años. Que te abran a puerta, te abracen y te digan 'bienvenida a casa' fue.... ", cuenta emocionada. "El abrazo de Eva fue el primero que yo sentía fuera de prisión. A ella le debo la vida y la oportunidad que tengo ahora". A esta declaración se sumaron las palabras de agradecimiento de otros muchos reclusos. "Gracias por existir, gracias por salvarnos y gracias por darnos una segunda oportunidad", le dijeron a Ángeles, cuya lucha sigue siendo incansable después de tantos años. "Yo lo que quiero es que salgáis adelante", ese es su único deseo.
El orgullo de Juan del Val y Nuria Roca
"Esta señora es una mujer monumental… Y entre otras cosas mucho más importantes, también es mi madre", decía Juan del Val en 2019 cuando quiso destacar la gran labor que desempeñaba su madre. Entonces se publicó un artículo que decía: "La abuela del millar de presos" y Nuria Roca quiso compartir el reportaje con sus seguidores. "Ángeles. La abuela del millar de presos. La abuela de mis hijos. La madre de Juan. Mi suegra", comentó orgullosa. Así es como se dio a conocer el admirable trabajo de esta señora, que continúa su lucha cuando está a punto de cumplir 80 años. La historia comenzó a raíz de una charla con un párroco que le comentó que faltaban voluntarios para ir a las cárceles y ella se ofreció. Al cabo de tres años comenzó su labor al frente de su asociación y en la actualidad rehabilita a 20 presos al año. Apromar dispone ya de seis pisos y cuarenta y tres camas para acoger a los presos.
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