María Pombo se ha sentado con el youtuber Luc Loren para hablar de salud mental, un tema que nos afecta a todos, pero que todavía sigue siendo tabú. La influencer, de 25 años, ha reconocido que va a terapia para gestionar sus emociones. "Llevo un año yendo al psiquiatra, pero a mi me está tratando como psicóloga porque no estoy tomando ninguna medicación por ahora. Esperemos que no llegue a ello, pero si llego no pasaría nada", confesó la joven. "No voy porque estuviera mal o llorando por las esquinas. Voy porque es necesario cuidar la mente. Además creo que era importante para mi sentarme con alguien externo, que no fuera de mi familia, a contarle todo lo que estoy viviendo", añadió
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La madrileña comenzó a ir a terapia "por una polémica" en redes sociales. "En ese momento yo no tenía esclerosis múltiple, pero los comentarios eran muy dañiños. Me decían: 'tu madre se merece la enfermedad que tiene", "ojalá te mueras"... además ponían mi dirección y comentaban "prepárate porque te va a pasar algo"... cosas muy duras", recordó. "Fue Pablo quien, al verme llorar, me dijo que no podía llegar a ese punto", reveló.
María no había contado hasta ahora que iba al psiquiatra por miedo. "No es algo de lo que te tengas que sentir avergonzado, pero no lo he contado porque parece que no tengo derecho a quejarme, me da miedo que la gente piense que no valoro todo lo que tengo", explicó. "La gente tiene un estigma hacia la salud mental", prosiguió, y compartió que a veces se siente demasiado juzgada. "Siento que al estar en una posición de privilegio no tengo derecho a quejarme. Si notan que estás mal pueden ir incluso a por ti porque tu vida es maravillosa y te mereces que te vaya un poquito mal. Eso es un poco lo que siento en Instagram", aseguró.
En estos momentos, la influencer se encuentra muy feliz por su embarazo, pero con la preocupación lógica tras saber que tiene esclerosis múltiple. "Llevo unos meses con más ansiedad de lo normal. Han sido los mejores meses de mi vida, pero también los peores. El confinamiento fue muy estresante porque me llegaron dos noticias muy distintas, una muy buena y otra muy mala. Cuando estás en una posición como la mía creo que no se puede decir en alto que estás mal porque te juzgan. Incluso me juzgo a mi misma, pero es normal que me queje, porque me acaban de dar una noticia muy mala, y a la vez tengo una noticia buenísima, en tres meses nace una persona que va a depender absolutamente de mi, entonces me siento muy afortunada, pero por otro lado no dejo de preocuparme", contó con gran sinceridad.
Luc Loren, el conductor de esta entrevista que se puede ver en su canal de YouTube y que se ha realizado dentro de la campaña #Asímesiento de la plataforma Somos Estupendas, se interesó por cómo había encajado el diagnóstico de su enfermedad. "Lo gestiono de manera bastante positiva. Cuando empiezo a tener sintomas deseo que sea esclerosis múltiple y no otra cosa. Cuando me dan el diagnostico respiro porque yo no sabía si era un tumor, un cáncer... algo mucho más invasivo que yo no he vivido porque la esclerosis la he vivido toda mi vida en casa y sé que ahora los tratamientos son cada vez mejores y se invierte mucho dinero en esta enfermedad", dijo. Eso no significa que la influencer no llorara y se preocupara porque, al final, "es una enfermedad para toda la vida". "No te mueres de ella, pero te mueres con ella", apuntó.
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Asimismo manifestó que la llegada de Martín es lo mejor de este año. "He deseado esto toda mi vida. Es de las cosas más bonitas que me han pasado. Es la razón para seguir adelante y no hundirme", concluyó.
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