Este verano Sara Carbonero e Iker Casillas se han mudado a Madrid después de cinco años viviendo en Oporto. La decisión del exfutbolista de dejar el deporte un año después de su infarto fue uno de los detonantes de que la familia hiciera las maletas, pero lo cierto es que la tomaron entre todos, tal y como ha contado la periodista en la presentación de su nueva colección de Slow Love junto a Isabel Jiménez. "Me apetecía. Bueno, nos apetecía porque al final ha sido una decisión familiar", cuenta. La madre de Lucas y Martín ha compartido su estado de ánimo lleno de optimismo y positividad, considerando que las nuevas etapas, como la que comienza ahora en la capital española, "son oportunidades".
Para ti que te gusta
Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!
Para disfrutar de 8 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.
Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
- Sara Carbonero confiesa su amor por Madrid, ciudad en la que acaba de instalarse con su familia
- Compra aquí la última coleccion 'slow' creada por Sara Carbonero e Isabel Jiménez
Sin embargo, su marcha de Oporto no quiere decir que Sara no estuviera encantada en la ciudad portuguesa. De hecho, ella se confiesa "una enamorada de la cultura" del país luso, algo que no dudaba en compartir casi de manera semanal en sus redes sociales durante estos últimos cinco años. Eso sí, ahora no quiere quedarse estancada en el tiempo vivido y prefiere mirar hacia delante y pasar página: "Mirar para atrás tampoco me gusta mucho". Además, la presentadora está "muy ilusionada" por su vuelta a Madrid, que es para ellos como volver a casa, y donde encima han recibido un fantástico recibimiento gracias a este nuevo proyecto con su amiga Isabel.
- Sara Carbonero recupera el pulso de su vida en Madrid
- Sara Carbonero e Isabel Jiménez, conexión y complicidad en su nuevo proyecto
Las dos periodistas han contado durante esta presentación los detalles de cómo ha surgido la colaboración con Cortefiel, de cómo han seleccionado las prendas o de cuáles son sus favoritas. Para Sara, que lucía un vestido floreado en tono pastel con escote de pico, es precisamente esa la tendencia por la que apuesta en los próximos meses de otoño: los colores claros, los estampados, que naturalmente se asocian más con los meses de primavera y verano... La mujer de Iker Casillas está viviendo un momento dulce en su "vuelta a casa" y con el comienzo de nuevas etapas, aunque todavía se desconoce si la veremos otra vez en la televisión, que dejó en mayo del pasado año cuando fue diagnosticada con cáncer de ovario tras haber vuelto en febrero de su excedencia.
A principios de octubre veíamos como Sara recuperaba su pandilla en Madrid después de haber pasado estos años fuera. La presentadora se reunía con su amiga Marián, farmacéutica, divulgadora sanitaria y bloguera que hace llamarse Boticaria García, y unos días antes con Paula Echevarría y una amiga común, Elena Hernández. Además, sus hijos ya han comenzado en el colegio nuevo en la capital, donde Martín empezó 1º de primaria y Lucas cursa 2º de educación infantil.
Iker y Sara han puesto en alquiler el chalet de La Finca, que poseen en la exclusiva urbanización a las afueras de la capital, y todo apunta a que se instalarán en la casa -de 300 metros cuadrados- que el portero ha comprado en pleno centro de la capital, al lado del Parque del Oeste. "Nuevo curso. Muchas ganas", decía la periodista al regresar a Madrid, la ciudad donde comenzó su historia de amor con el deportista.