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La agenda de Eugenia Silva está repleta de compromisos. Además, es una mujer disciplinada a la que le gusta cuidarse para dar tanto en el trabajo como en su vida personal la mejor versión de sí misma. Tal y como compartía meses atrás en ¡HOLA!, apuesta por una rutina equilibrada en la que combina buena alimentación con deportes variados como ejercicios de alta intensidad, estiramientos, yoga... Aunque, sin duda, lo que hace a nuestra top más internacional estar en forma son sus hijos. Con seis y tres años respectivamente, Alfonsito y Jerónimo se han convertido en los mejores 'entrenadores' para ella gracias a los divertidos juegos que idean para entretenerse. Momentos de diversión en los que tienen en su mamá a una compañera incondicional. "Ni yoga, ni carreras en el parque o ejercicios de gimnasia, lo que más me carga las pilas y me llena de energía es jugar con mis dos hijos a caballeros, piratas y superhéroes", ha dicho divertida la modelo junto a una foto en la que aparece agachándose mientras observa al pequeño de la casa.
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Las inspiradoras palabras de Eugenia Silva a su hijo Jerónimo al cumplir tres años
Aunque antes solía pasar mucho tiempo fuera de casa, ahora Eugenia selecciona los proyectos a los que se suma para no separarse de su familia y poder estar presente en todo momento. Cuando trabaja desde casa, intenta hacer partícipes a Alfonso y Jerónimo de sus compromisos y su día a día, algo que parece encantar a los pequeños, quienes no dudan en ejercer de 'asistentes personales' con ella cuando la ven concentrada en el ordenador. También les gusta a los pequeños meterse entre fogones con su mamá y elaborar junto a ella recetas personalizadas que conforman el menú que luego degustan todos. "El hecho de comer un plato que ellos han preparado les divierte sobremanera, ¡tendríais que verles las caras! Alfonsito, en especial, disfruta mucho estos momentos, aunque en cuanto me despisto ha desaparecido ¡y me ha dejado la receta a medias!", nos relataba entre risas
Eugenia está encantada con la familia que ha formado al lado de Alfonso de Borbón, con el que no parece pensar en boda por el momento. De hecho, cuando se le pregunta por la idea de dar este paso ella suele decir que están bien así. La prioridad de ambos son sus niños, con los que se sienten plenos. Precisamente los pequeños han hecho a la modelo ver esta complicada etapa de crisis sanitaria con otros ojos y valorar las oportunidades que han surgido en medio de la adversidad. "Será difícil encontrar otro momento con tanto tiempo para estar con nuestros hijos. Estos días nos han quitado mucho, pero nos han dado también nuevas experiencias junto a ellos que nunca olvidarán, que nunca olvidaremos", reflexionaba en redes sociales la bloguera de HOLA.com. La maternidad ha cambiado por completo la vida de la modelo, quien considera que ser madre supera a cualquier otra cosa. De hecho, tras el nacimiento de Alfonsito, decidió dejar Nueva York, -allí tiene un apartamento y ha pasado largas temporadas desde hace décadas- porque cree que la Gran Manzana no es el mejor lugar para que sus niños crezcan.
Madrid y Formentera, sus dos refugios
Con el inicio del curso ha comenzado también la rutina para Eugenia y su familia, quienes han recargado fuerzas durante el verano gracias a largas jornadas de playa, juegos junto al mar, cenas bajo la luz de la luna... Unas idílicas vacaciones en las que pusieron rumbo a su lugar predilecto, Formentera. Allí tiene ella su refugio personal, una preciosa vivienda llamada Can Eu que está en un idílico enclave, en medio de la naturaleza, rodeado de pinos e higueras. Aunque se escapan a la isla balear siempre que tienen ocasión, los Borbón Silva también se sienten muy cómodos en su residencia habitual de Madrid, una casa situada junto al Parque del Oeste de Madrid que la modelo mostró orgullosa en las páginas de ¡HOLA! al estrenarla en 2019. “Es la unión de todos estos años: mi colección de arte, libros, muebles, recuerdos de todo tipo que guardo y que tienen mucho que contar. Y por otro lado, es la casa de mis hijos y donde se ha gestado mi nueva aventura como empresaria” decía ilusionada de este piso de estilo neoyorquino.