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El Festival de Cine de San Sebastián acoge estos días todo un desfile de celebrities del mundo audiovisual, pero también de otras artes como la música. Alejandro Sanz no se ha perdido la gran cita donostiarra -hoy se presenta en el festival El verano que vivimos, un drama romántico protagonizado por Blanca Suárez y Javier Rey, y en el que Alejandro Sanz es autor del tema central de la película-. Alejandro está en San Sebastián acompañado de dos de las mujeres más importantes de su vida: su novia, Rachel Valdés, y su hija, Manuela. A su llegada, posaba con su pareja, con la que se complementaba perfectamente formando un look conjunto en blanco y negro. Era el inicio de una jornada cinematográfica que acababa para Manuela con todo un capricho gastronómico: una cena de la mano del chef Martín Berasategui.
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La declaración de amor de Rachel Valdés en un día clave para Alejandro Sanz
El cantante, que no dejaba de saludar a los allí presentes, iba totalmente de negro, incluso la mascarilla, lo que contrastaba con la blancura del atuendo de Rachel, que tan solo la rompía con el negro de los bordes de su chaqueta, su bolso y, también la mascarilla. Juntos formaban un tándem perfecto, tanto por su estilo como por la buena sintonía que mostraban, la misma que exhibieron la primera vez que posaron juntos en el homenaje que hicieron al artista en Madrid el pasado mes de julio. Aunque no ha participado en el posado, junto a ellos llegaba Manuela Sanz, de 18 años, con un look muy deportivo formado por pantalón corto y sudadera con capucha. La hija del intérprete de Corazón Partío no solo mantiene una excelente relación con su padre, sino también con Rachel, como ha demostrado en muchas ocasiones en las que han compartido cariñosos comentarios en sus publicaciones o han estado juntas en el taller de la pintora cubana.
La guinda gastronómica
Después de disfrutar de una buena sesión de cine, la jornada no había acabado para Manuela, decidida a exprimir al máximo su escapada. Y qué mejor para rematar una visita a Guipúzcoa que darse un capricho gastronómico de categoría. La hija de Alejandro Sanz y Jaydy Michel daba pistas de lo que se avecinaba publicando una imagen de su mano, con unas moderna manicura en color azul, girando una copa, lo que ya auguraba que se encontraba en un local elegante. Resolvía el misterio con la siguiente foto en la que podemos ver una chaquetilla de chef dedicada por el mismísimo Martín Berasategui. "A mi gran amiga Manuela", ponía sobre la prenda.
Manuela, el gran orgullo de Alejandro Sanz y Jaydy Michel
Al día siguiente, el nivel culinario apenas bajó, a juzgar por las imágenes que ha compartido del impresionante desayuno con tortitas, frutas y zumo natural con el que comenzaba el día. Ya con las pilas cargadas, la joven no ha desaprovechado la oportunidad de disfrutar del mar Cantábrico, aunque las temperaturas solo les permitieron meter los pies tanto a ella como a Rachel Valdés, que le acompañaba en su excursión a la playa.
Alejandro Sanz y Rachel Valdés llevan saliendo más de un año, pero no fue hasta noviembre del año pasado cuando el cantante oficializó su relación al acudir junto a ella a la ceremonia de entrega de los Grammy Latinos. Era la primera vez que se dejaba ver junto a su novia en público, pero el músico fue más allá cuando, antes de subir a recoger uno de sus premios, se acercó a la artista cubana y la besó. Ahora, la pareja comienza una nueva etapa después del acuerdo de divorcio al que ha llegado con Raquel Perera, madre de sus dos hijos pequeños, Dylan y Alma, poniendo punto y final al proceso que iniciaron el pasado verano, cuando decidieron poner fin a su matrimonio tras 12 años juntos - se casaron por sorpresa en 2012- en los que compartieron su vida personal y también estuvieron vinculados profesionalmente.