Fue el pasado año cuando los caminos de Sylvie Meis y Niclas Castello se cruzaron en la boda de unos amigos, pero estos meses juntos han sido suficientes para que ambos se den cuenta de que están hechos el uno para el otro. La pareja ha decidido convertirse en marido y mujer, un importante paso que han dado este sábado en un romántico enclave, la Toscana italiana. En el hotel Villa Cora de Florencia, que tiene cinco estrellas y data del siglo XIX, han pronunciado el "sí, quiero" rodeados de sus seres queridos, quienes no han querido perderse esta boda civil al aire libre en la que la novia estaba espectacular con un vestido de Galia Lahav palabra de honor con abertura en la pierna y una original cola. Uno de los momentos más emotivos de la ceremonia ha sido cuando ha participado Damian, el hijo de catorce años de ella, que la ha acompañado también hasta el altar.
La boda parece sacada de un cuento de hadas. La ceremonia se ha llevado a cabo en los jardines del hotel, donde han instalado el altar con un impresionante arco de flores. Los invitados han ocupado sillas doradas -algunas también con adornos florales- divididas en dos partes para dejar hueco a una gran pasarela blanca por la que ha desfilado Sylvie. Pero antes de hacer este recorrido, la modelo holandesa ha sorprendido a todos los allí presentes saliendo por un balcón, un instante mágico puesto que ha sido entonces cuando ha quedado desvelado el secreto mejor guardado, su look nupcial. Un vestido que se espera que no sea el único, y es que ya adelantó ella misma que en los festejos (repartidos en varios días) llevaría cuatro diferentes.
Unos días llenos de emociones
Este viernes, Sylvia y Niclas eran fotografiados saliendo del Palazzo Vecchio de Florencia, una visita durante la cual podría haberse producido su unión oficialmente ya que es allí donde suelen producirse este tipo de actos. Por la noche citaron a todos sus invitados para celebrar a su lado una glamurosa preboda en la que ella ya vistió de blanco, aunque en este caso un vestido corto con mucho vuelo con el que estaba espectacular. Por su parte, el novio, que es artista contemporáneo, no se quedaba atrás y también huía del clásico smoking tradicional. En su lugar elegía uno con chaqueta color crema y pajarita negra para disfrutar de una noche llena de romanticismo e ilusión con su prometida, para la que es su segundo matrimonio. Cabe recordar que hasta 2013 estuvo casada con Rafael Van der Vaart, con el que vivió en España ya que él jugaba en el Real Madrid y tuvo a su único hijo.
"Nunca he estado tan preparada para decir 'SÍ'. Publicaré de nuevo después del fin de semana... En el momento en que me case con mi gran amor quiero disfrutar y absorber cada segundo", escribía Sylvie un día antes del enlace junto a una serie de fotografías en las que posa con un impresionante vestido rojo como preludio del inolvidable día que tiene por delante. Dicen que da mala suerte ver a la novia antes de la boda, pero la modelo y el artista han decidido dejar las supersticiones a un lado y no se han separado en las horas previas. Además de la glamurosa sesión de fotos, ese mismo día se dejaron ver dando un romántico paseo de la mano en unas imágenes en las que derrochan complicidad y ternura.