Han pasado un verano agridulce y atípico, pero la temporada estival acaba con una buena noticia para Olivia de Borbón y Julián Porras-Figueroa. El matrimonio está afincado en Marbella, localidad que ha rendido homenaje al padre de ella, el duque de Sevilla, cuyo título da nombre a partir de ahora a una calle del municipio de la Costa del Sol. Francisco de Paula Enrique de Borbón y Escasany, primo del rey Juan Carlos, se convertía de este modo en protagonista de un solemne acto en el que destapó un monolito donde se encuentra la placa de color blanco con el nombre de esta vía pública en azul. Junto a él, las autoridades y un grupo de allegados del que formaba parte, entre otros, su hija, sus nietos y su yerno, quien precisamente ha querido compartir algunas pinceladas del momento tan bonito que vivieron. "Orgulloso y feliz por la concesión de la calle Duque de Sevilla a mi querido suegro en un acto presidido por la alcaldesa de Marbella, doña Ángeles Muñoz Uriol, familiares y amigos cercanos", ha explicado el empresario.
La preciosa carta de despedida de Julián Porras-Figueroa a su suegra, Beatriz von Hardenberg
En ¡HOLA!, Olivia de Borbón y Julián Porras-Figueroa nos enseñan su nuevo hogar marbellí
Uno de los momentos más emotivos fue cuando Olivia de Borbón subió a una tribuna que se instaló en esta nueva vía para dirigir unas palabras llenas de cariño y admiración a su padre, del que resaltó sus valores y también las buenas acciones que el aristócrata ha hecho. "Emotivo discurso de Olivia hacia su padre, destacando sus valores y calidad humana. También, agradeciéndole con sus actos y buen hacer, el buen nombre que a lo largo de su vida ha dejado en muchos lugares del mundo de la Casa Ducal de Sevilla. Todo mi cariño y admiración. Enhorabuena", ha explicado Julián, quien ha publicado algunas imágenes de las que se hicieron en este acto. Una de las instantáneas más bonitas es, sin duda, en la que aparecen los pequeños Flavia y Fernando Enrique -de tres y dos años, respectivamente-.
Unos recuerdos muy presentes
A finales del pasado año, Oli -así la llaman cariñosamente sus allegados- y Julián abrían en exclusiva para ¡HOLA! las puertas de su hogar marbellí, una preciosa casa con jardín y piscina en la que los pequeños puedan jugar al aire libre. Marbella no solo es el lugar en el que esta familia escribe su historia diariamente, sino que también fue allí donde la pareja se conoció y donde dieron un paso más pronunciando el "sí, quiero" en el palacio de Villapadierna en octubre de 2014. Esta localidad andaluza está, además, llena de vivencias importantes para ambos puesto que allí han compartido mucho tiempo con la madre de ella, la princesa Beatriz von Hardenberg, y con su hermana Cristina, ambas fallecidas recientemente. Lo cierto es que el recuerdo de las dos sigue muy presente y esta misma semana Olivia escribía unas preciosas palabras coincidiendo con el día en el que su hermana hubiese cumplido años. "Este año me toca celebrarlo sin ti. Aún no tengo palabras para describir el vacío que nos has dejado, pero prometo hoy recordar todos esos miles de momentos que pasamos juntas con alegría. Te quiero para siempre mi Cris", decía con una foto de cuando eran niñas.