Después del nacimiento de su primer hijo, Lorena Castell abandonó su piso con terraza de la capital para irse a vivir a una casa en el campo. La presentadora ha hecho a sus seguidores partícipes de la decoración de su nuevo hogar, en el que el pequeño Rio es el protagonista. Lorena planea preparar con su padre un pequeño parquecito para el pequeño y ya ha adaptado la piscina con el objetivo de que el bebé pueda bañarse sin tempor a que se hunda. La mamá primeriza disfruta también de las bondades de su huerto y siempre tiene tiempo de hacer algo de ejercicio en el pequeño gimnasio que ha creado. A pesar de lo rural de los exteriores, el interior de la casa goza de la moderna personalidad de la presentadora de Zapeando. Una nueva casa que Lorena ha transformado hasta convertirla en su hogar.