El rock americano está de luto tras conocer el fallecimiento de Justin Townes Earle, a los 38 años. Así lo ha confirmado su familia a través de un comunicado en el que rinden tributo al artista. "Con gran tristeza te informamos del fallecimiento de nuestro hijo, marido, padre y amigo Justin", comenzaba así el mensaje transmitido por sus seres queridos a todos los seguidores del músico, que estaba casado y tenía una hija de tres años.
"Muchos de vosotros habéis confiado en su música y en sus letras a lo largo de los años y esperamos que su música continúe guiándoos en vuestro viaje. Te echaremos mucho de menos Justin", continuaba el escrito que concluía con una estrofa de su canción Looking for a Place to land, de su álbum Absent Fathers: "He cruzado océanos/ luchado contra la lluvia helada y la arena/ he cruzado fronteras y carreteras y ríos sinuosos/ simplemente buscando un lugar en el que aterrizar". El comunicado no especifica la causa de la muerte.
Justin Townes Earle nació en Nashville (Estados Unidos), la cuna del rock popular americano. Además, era hijo de una estrella del country-rock como Steve Earle, por lo que hubiese sido una sorpresa que su destino no fuese la música. Siendo un adolescente ya integró dos conjuntos, The Distributors y The Swindlers. Posteriormente, formó parte de The Dukes, la banda de su padre. Sin embargo, sus problemas con las drogas acabar por frustrar la unión de padre e hijo en los escenarios y acabó siendo despedido del grupo.
Tras pasar por rehabilitación, él mismo habló en más de una ocasión de sus adicciones y su lucha para superarlas, confesando en una entrevista en The Charleston City Paper que con 21 años ya había estado a punto de morir de sobredosis hasta en cinco ocasiones. Asegurando que ya se encontraba totalmente recuperado, inició su carrera en solitario en 2007 con Yuma. Era el inicio de una prolífica década en la que publicó ocho álbumes con los que se consolidó como uno de los referentes del panorama musical de Nashville.