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Con once años -los cumplió hace justo un mes-, parece que Ava Salazar Vega tiene muy claro que se siente muy cómoda delante de las cámaras. Tras ejercer como modelo y hacer sus pinitos en la interpretación, ahora la hija de Paz Vega y Orson Salazar -quienes tienen además otros dos hijos, Orson y Lenon- ha dado el salto a la gran pantalla. La pequeña forma parte de La casa del caracol, una película que, con toda probabilidad, recordará para siempre con cariño y marcará su incipiente carrera. No en vano, se trata de su debut cinematográfico, una experiencia inolvidable que tiene la suerte de compartir con su madre, con la que trabaja por primera vez. El rodaje concluía días atrás después de varias semanas en Málaga, por tanto aún hay que esperar para ver el resultado, conocer los papeles que ambas hacen y la relación ficticia que hay entre ellas, pero como adelanto sí hemos podido ver ya fotos de las dos compartiendo algunas escenas.
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En una de las imágenes adelantadas en el Festival de Málaga, Ava lleva el pelo suelto, una camiseta de manga corta de rayas, falda azul y está acompañada de su madre. En otra, con vestido blanco abotonado, protagoniza una inquietante escena con Luna Fulgencio -la joven actriz de Padre no hay más que uno-. Las dos niñas se han sumado a un elenco del que forman parte, además de Paz Vega, otros rostros conocidos del mundo de la interpretación como Javier Rey, Carlos Alcántara y Norma Martínez. Para esta primera gran producción que concluye su rodaje tras el confinamiento, todos ellos se han puesto a las órdenes de Macarena Astorga, quien firma su primer largometraje de ficción después de dirigir a lo largo de su carrera varios documentales y cortometrajes.
El proyecto que Paz Vega repetiría 'con los ojos cerrados' (y no es una película)
Paz Vega comparte uno de sus momentos más emocionantes de su carrera
La casa del caracol es un thriller fantástico y de terror psicológico en el que se cuenta la historia del escritor Antonio Prieto, quien decide pasar el verano en un pueblo de la serranía malagueña donde espera encontrar tranquilidad e inspiración para su siguiente novela. Allí conoce a Berta, una mujer por la que siente una atracción instantánea, así como a algunos personajes peculiares sobre los que empieza a investigar. Descubre entonces que estos guardan numerosos secretos y una perturbadora leyenda oculta. Antonio comienza a descubrir que los locales guardan numerosos secretos y una perturbadora leyenda oculta. La realidad que vivirá en esos días le harán ir dándose cuenta que, a veces, la realidad supera con creces los mitos...
Un extenso currículum y el apoyo de su familia
Paz Vega, a la que durante la temporada estival la hemos visto disfrutar de unos días de relax en familia por Málaga, aprueba la decisión de Ava de seguir sus pasos. Además, pone todo de su parte para que la niña se divierta en esta primera etapa como actriz y lo vea como un juego. Hace dos años, la pequeña aparecía en un capítulo de Paquita Salas -interpretaba a Pilar López de Ayala en su infancia- y quedó encantada con la experiencia. "Es lo primero que ha hecho y le encantó, la verdad, se lo pasó muy bien y salió muy contenta”, aseguraba su madre, quien siempre ha dicho que le encantaría que sus tres hijos siguieran sus pasos. De momento, la única que parece haber dado pistas desde muy pequeña ha sido Ava, y no solo porque en casa "canta, baila, actúa..." para sus padres y hermanos, sino porque cuando ha acompañado a la intérprete de Rambo 5 a algún compromiso profesional se ha desenvuelto como pez en el agua. También ha demostrado tener un gran talento para la moda posando para el catálogo de Zara Kids. Unas imágenes muy naturales en las que Ava juega con el objetivo de la cámara sin forzar su actitud.
A pesar de que es feliz dedicándose al mundo de la interpretación, la verdadera felicidad de Paz es la numerosa familia que ha formado junto a Orson Salazar, con el que lleva prácticamente dos décadas de sólida relación. Por eso, aunque adora su trabajo, confiesa que lo que peor lleva de su oficio es no poder estar con los suyos tanto tiempo como le gustaría. "Ha sido un año bonito, intenso, donde he hecho cosas que me han aportado mucho y en ese sentido estoy muy contenta, pero he tenido que pagar ese peaje, he estado demasiado tiempo sin estar con mi familia, demasiado y lo he pasado un poco mal", decía al hacer balance del pasado año.