Justin Bieber y Hailey Baldwin han estrechado sus lazos espirituales más allá de su condición de marido y mujer. El intérprete de Love Yourself y la modelo decidían bautizarse juntos en una ceremonia íntima, celebrada en un lago de Idaho, durante un viaje por carretera que el matrimonio hizo el mes pasado, como ha informado Daily Mail.Transcurridas varias semanas, la estrella de la canción ha querido compartir ahora con sus 143 millones de seguidores el álbum personal de ese significativo momento de su vida. Junto a las instantáneas de la pareja dentro del lago recibiendo las aguas bautismales, Bieber ha escrito: "¡En el momento en que @haileybieber, mi esposa y yo nos bautizamos juntos! Este ha sido uno de los momentos más especiales de mi vida. El de confesar nuestro amor y confianza en Jesús públicamente con nuestros amigos y familiares". Dos horas después de estar primera publicación, el artista reaparecía con una imagen en la que se le ve sonriente a bordo de un barco y añadía: "Me siento muy bendecido".
El pastor Judah Smith, maestro espiritual de Bieber desde hace un lustro, fue el encargado de dirigir la ceremonia, como se puede apreciar en varias de las instantáneas del rito, mientras los protagonistas se sumergen en el agua, así como en una fotografía charlando en calma con su pupilo espiritual. Junto a la pareja y el oficiante, un nutrido grupo de amigos fueron testigos de excepción del momento. Entre ellos se encontraban el presentador de televisión Jason Kennedy, que afirmaba: "Hacer esto contigo ha sido uno de los mejores momentos de mi vida" y otro de los mentores espirituales de Justin, el pastor Carl Lentz, que no dudaba en declarar sus sentimientos a la estrella: "Ha sido increíble, te quiero".
Con esta íntima y tranquila celebración, Justin se resarcía de su primera experiencia con el bautismo, hace años de la mano de Lentz. Una frenética vivencia que recordaba en una entrevista concedida a la revista GQ en junio de 2014. Después de intentarlo en la Iglesia Hillsong de Nueva York, donde Smith y Lentz solían predicar, y no poder culminar la ceremonia por la legión de fans apostados en la puerta del templo, el acto tuvo lugar en la enorme bañera de un feligrés, Tyson Chandler.
Justin abrazó la fe después de tocar fondo en su vida personal y profesional. Así lo explicaba el propio protagonista en una entrevista con Zane Lowe: "La forma en la que veo a Dios y mi relación con Jesús no tiene nada que ver con hacer cosas buenas para ganarme su amor. Dios me ha llamado antes de que hiciera algo para merecerlo". Una profunda fe que desde hace ya dos años, y ahora mucho más, tiene en su mujer, Hailey Bieber, a la mejor compañera de camino.
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