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Alan Parker, aclamado director de cine británico, ha fallecido esta mañana a los 76 años tras una larga enfermedad. Así lo ha confirmado el Instituto de Cine Británico, del que fue miembro durante años. La familia del también guionista no ha querido dar más detalles acerca de su delicado estado de salud. El expreso de medianoche fue la obra que catapultó su carrera, en la que tuvo la ayuda de Oliver Stone para el guion, contando la historia, basada en un hecho real, de un joven estadounidense condenado a la cárcel por culpa del tráfico de drogas en Turquía, comenzando así una trepidante y duro relato que estuvo protagonizado por Brad Davis. La película consiguió dos Oscar, de las 6 nominaciones que obtuvo, y seis Globos de Oro, además de lanzar a la fama tanto al director como al jovencísimo guionista.
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Alan Parker vivía junto a su segunda mujer, la productora Lisa Moran, y deja una familia formada por cinco hijos. Uno de ellos siguió su estela y actualmente forma parte del séptimo arte como guionista. Sus orígenes humildes, criado en el barrio londinense del norte Islington, no le impidieron tener una diversa carrera profesional, desde montador de anuncios de televisión hasta formar parte de agencias de publicidad. De ahí pudo dar el salto al cine, que acabó por convertirse en su gran pasión. "Estamos muy tristes de informar del fallecimiento del director de cine británico Alan Parker", ha asegurado en un comunicado la entidad, provocando un aluvión de despedidas tanto por parte del sector como de la crítica.
El director se retiró de la profesión con una última película en el 2003, La vida de David Gale, que contaba con unos jóvenes Kevin Spacey y Kate Winston. Este alegato contra la pena de muerte no fue su despedida soñada, fracasando tanto en crítica como en taquilla. Aunque su filmografía se caracteriza por cambios constantes de género, el musical fue siempre su favorito. Así pudo realizar su proyecto más ambicioso, Evita, contando con Madonna en el papel principal de Eva Perón y adaptando la obra musical homónima de los 70 en Argentina. Antonio Banderas interpretó al interés amoroso de la protagonista, quien también ejerce de narrador.
La icónica Fama fue otro de sus trabajos relacionados con los musicales, que no le acabaron por valer un Oscar a mejor director a pesar de haber estado nominado en dos ocasiones. Con un mayúsculo respeto por parte de la profesión y de la crítica, Alan Parker ha trabajado con actores de la talla de Mickey Rourke, cuando este se encontraba en el mejor momento de su carrera, Gene Hackman o Willem Dafoe, en Arde Mississippi. Entre sus logros también se cuenta el título de Caballero del Imperio Británico por su contribución al mundo del arte, que le concedió la Reina Isabel en el año 2002, además de recibir en el 2013 el Bafta honorífico a toda su carrera por parte de la Academia Británica de Cine. Su relación de cariño con España tenía especial interés en su querida Barcelona, en la que rodó en numerosas ocasiones.