Los tatuajes de Aitana suelen ser muy discretos: pequeños, con líneas finas y puntillismo. La exconcursante de OT 2017 ha seguido esta misma línea en dos nuevos diseños que ahora pueblan su piel, pero advertimos que uno de ellos... ¡puede causar fobia a algunas personas! El otro, en cambio, es un bonito homenaje a su mascota Sopa, un cachorro que adoptó a principios de julio. El can se llama así porque cuando la protectora le encontró, estaba "hecho una sopa", completamente empapado de los cubos de agua que le echaban los vecinos del barrio donde merodeaba. Temían que les contagiara alguna enfermedad y de esta manera intentaban que se marchara, sin éxito. Ahora, el perrito vive una nueva vida feliz junto a su nueva dueña, que siempre le recordará con tinta en la piel.