Kiko Matamoros ha dejado sin palabras a los telespectadores de Sálvame después de revelar que está a punto de volver a pasar por el quirófano. La noticia no solo ha pillado por sorpresa a la audiencia del programa, sino también a sus compañeros de plató, quienes han escuchado atentamente el motivo por el que el tertuliano tendrá que ser intervenido de nuevo. A pesar de que, inicialmente, el resto de colaboradores pensaban que el motivo de la intervención del padre de Diego Matamoros era estético, Belén Esteban se ha encargado de aclarar que se trata de algo médico. A continuación, ha sido el propio Kiko Matamoros el que ha explicado cuál es esta nueva operación y las consecuencias de la misma.
El exmarido de Makoke se someterá a una extracción de vesícula el próximo lunes, 27 de julio. Esta extirpación no impedirá al padre de Laura M. Flores continuar haciendo vida normal, aunque tendrá algunas restricciones en su dieta. "Al no tener vesícula, que es donde se genera la bilis, hay alimentos a evitar como la grasa, el picante, el alcohol… Un montón de cosas que van a cambiar mi vida", ha apuntado Matamoros, quien afronta la intervención con sosiego y mucha tranquilidad.
La vesícula lleva tiempo dando problemas al colaborador, quien tuvo que ser intervenido de urgencia tras degustar uno de los platos elaborados por Marta López y Kiko Hernández en el programa de La Última Cena. En concreto, un steak tartar que tuvo efectos inesperados en el tertuliano y le obligó a acudir a urgencias para finalmente ser intervenido por una obstrucción del conducto biliar. "El steak tartar que hiciste era una bomba. Me lo comí por dar en la boca a todos los que estaban diciendo que no estaba malo y acabé en urgencias", revelaba el padre de Ana Matamoros a Kiko Hernández. No obstante, Matamoros no fue el único comensal al que no le convenció la elaboración. Tanto es así que, Jorge Javier Vázquez críticó duramente el plato, que consideró "bastorro e insípido, con trozos de carne enormes". Y, a continuación, Matamoros apuntaba que había tenido que ser operado, aunque sus compañeros no terminaban de creérselo. Kiko Hernández, el artífice del plato, no podía evitar reírse al escuchar el testimonio de Matamoros. Con sentido del humor, el colaborador 'amenazaba' con denunciar al programa por este incidente.
Esta nueva intervención se produce justo un año después del gran susto que recibió el colaborador de Salvame, que tuvo que someterse a una intervención para extirparle varios tumores en la vejiga. Afortunadamente, la intervención fue todo un éxito y durante el proceso de recuperación Kiko no solo contó con el cariño y apoyo incondicional de sus compañeros y familiares, sino también con el de su actual pareja, la modelo Marta López Álamo.