Han sido muchos los rostros conocidos que en los últimos meses han sufrido los efectos del coronavirus, compartiendo después con sus incondicionales que habían superado la enfermedad. El último en hablar de su experiencia ha sido el veterano actor Miguel Rellán, reconocido por sus papeles en Compañeros o la actual Vergüenza. A sus 76 años permaneció 20 días ingresado en el hospital, como ha contado en una entrevista con Aisge, en la que ha reflexionado sobre el futuro tras esta etapa de crisis sanitaria. “No podía levantar siquiera el brazo, era como si me hubieran dado una paliza, aunque estaba convencido de que no me iba a morir”. Comenta que se encontraba mal, por lo que acudió a urgencias. El resto de lo que ocurrió lo tiene “borroso”.
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Las lágrimas de Tristán Ulloa al recibir el alta médica: 'Las condiciones son tercermundistas'
“Los hay que piensan que esto significará un antes y un después, pero yo creo que no. Seguirá habiendo gente estupenda y gente que no” reflexiona, asegurando que las imágenes del mundo vacío y de aquellos que no han podido despedirse de sus seres queridos han sido “horribles”. Está deseando retomar su rutina profesional, que tuvo que dejar aparcada debido a la enfermedad. Algunos de sus compañeros supieron lo que estaba ocurriendo debido a que, apenas unos días después de su ingreso, tenía que haberse estrenado como director de la obra de teatro Contarlo para no olvidar, protagonizada por Nuria González y Nuria Mencía.
Un veterano de la interpretación española
Miguel es un intérprete con una exitosa carrera en teatro, cine y televisión en la que se incluyen títulos como El perro del hortelano (dirigida por Pilar Miró, 1996), El bosque animado (de José Luis Cuerda, 1987), Sangre de mayo (José Luis Garci, 2008), entre otros. Series como Compañeros, La Regenta, Frágiles o Fenómenos y un buen número de obras de teatro. En su palmarés cuenta con varios premios de la Unión de Actores, Fotogramas y un Goya como mejor actor secundario por su papel en Tata Mía, de J.L. Borau (1987).
Itziar Ituño, de La casa de papel, Vanesa Romero y Tristán Ulloa son otros de los actores que se recuperaron de la enfermedad y compartieron cómo les había afectado.