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Paz Padilla quería homenajear a su marido, Antonio Vidal, fallecido este fin de semana a los 53 años, y que su último adiós fuera un recuerdo precioso, un canto al amor y una despedida tal y como él quería. Tenía claro que no iba a ser el típico funeral, aunque no por ello dejaría de ser emotivo. Y es que la pareja había tenido tiempo para despedirse y, probablemente, para hablar de cómo sería este día en el que la presentadora de Sálvame hacía gala de su entereza y serenidad, pese al tremendo dolor que lleva por dentro.
El profundo dolor de Paz Padilla en el último adiós a su marido
© GtresonlineEl reportero José Antonio León, uno de los asistentes al sepelio, era el encargado de desvelar cómo había transcurrido la ceremonia, en la que han primado las estrictas medidas de seguridad debido a la pandemia de COVID-19. Justo antes de acceder al templo, y mientras se producía la llegada del féretro, Paz Padilla se llevaba una mano al pecho. Era uno de los momentos más emotivos. La andaluza había portado una corona en la que podía leerse "¿te quieres casar conmigo? Tes quiero my love", una preciosa frase a modo de declaración de amor hacia su marido.
Acompañada de su hija Anna Ferrer, la presentadora ocupaba su lugar en el interior de la iglesia, en la que sonaron, en varias ocasiones, los aplausos. "Ha sido muy emocionante, un funeral a la americana. Es la primera vez que estoy en una despedida así, en la que, a pesar de la música, el canto y el baile, ha sido muy respetuosa", explicaba José Antonio León antes de pasar a narrar lo sucedido durante la misa.
A lo largo de la ceremonia, sonaron algunas de las canciones favoritas de Antonio. Entre ellas se encontraba el tema que el marido de Paz Padilla quiso bailar en el cumpleaños de la gaditana. "Paz nos ha dicho que bailásemos, y algunos nos hemos levantado y lo hemos hecho, a la vez que nos emocionábamos". Asimismo, varios asistentes pudieron dedicarle bonitas palabras en un discurso que, de nuevo, volvió a despertar la sensibilidad de todos.
Familiares y amigos llegan al tanatorio para despedir a Antonio Vidal
© GtresonlineNada más terminar el oficio religioso, todos salieron del templo para recorrer unos metros detrás del coche fúnebre. En ese momento, Paz no pudo más y se dejó ver desolada, con la mirada fija en el suelo y sin poder contener las lágrimas. Su hija, que seguía a su lado, se encargó de evitar por todos los medios que la presentadora se rompiera. Junto a ellas, además de numerosos familiares y amigos, se encontraban también algunos de los compañeros de trabajo de la gaditana, que este lunes mostraban públicamente su sorpresa por la decisión de Paz de haber mantenido la enfermedad de su marido en silencio durante todos estos meses.
