No están siendo momentos fáciles para Paz Padilla. La presentadora vivió con discreción el delicado estado de salud en el que se encontraba su marido, Antonio Vidal, que falleció el pasado domingo a causa de un tumor cerebral. La tragedia ha ocurrido apenas cinco meses después de que Paz tuviera que decir adiós a su madre, de 91 años. En estas difíciles situaciones, el mejor apoyo que tiene la actriz es su hija Anna. Ambas se quieren mucho y comparten todos los aspectos de su vida, desde una tarde en el huerto hasta profesión, cuando la joven comenzó su andadura en televisión presentando un programa en la misma casa que su madre, Telecinco. Su cariño será fundamental para ayudar a Paz a superar este duelo.